Alberto Fernández llegó esta mañana a los tribunales de Comodoro Py para declarar ante el juez Julián Ercolini como acusado por violencia de género contra su ex pareja y ex primera dama Fabiola Yañez.
Si bien había sido convocado a las 11, el ex presidente Alberto Fernández llegó a los tribunales de Retiro una hora antes, a las 10 y fue directo hasta las oficinas de Ercolini donde escuchó la acusación del fiscal Ramiro González, quien pide una pena de 18 años. Fernández se remitió a dejar un escrito en el que negó la imputación y contestó las preguntas de su emitir declaraciones públicas.
En el marco de la audiencia por la causa seguros, Fernández ayer había insistido en su cuestionamiento al juez Ercolini, a quien pidió apartar del caso porque tendría un especial encono en su contra.
“No estoy paranoico, Ercolini me detesta y me quiere cobrar venganza”, dijo ayer Alberto Fernández, quien sostiene que el juez le achaca responsabilidad en la filtración de los chats, el año pasado, que dieron cuenta de su viaje a Lago Escondido para reunirse con el empresario Joe Lewis, funcionarios de la Ciudad de Buenos Aires y ejecutivos del Grupo Clarín.
No estoy paranoico, Ercolini me detesta y me quiere cobrar venganza
Por esto, la defensa del ex presidente, a cargo de la abogada Silvina Carreira, pidió suspender la indagatoria de hoy. Lo solicitó hasta tanto recupere el celular que le secuestraron en la causa. Planteó que sin acceso a prueba que hay en el móvil se viola su derecho de defensa. El planteo fue rechazado ayer por el magistrado.
Ercolini sostuvo que Alberto Fernández y su defensa "conocen el hecho y la prueba que abarcan la imputación que le será formalizada en el acto que pretende suspender” desde noviembre pasado, cuando había sido citado primero para el 11 de diciembre y después para el 19. Pero esas audiencias se suspendieron porque la defensa recusó a Ercolini. El pedido fue rechazado a fin de año y así se fijó la indagatoria de hoy.
“Que la necesidad de contar con los dispositivos electrónicos aquí secuestrados para poder elaborar su defensa la introdujo recién el pasado 24 de enero, por lo que no se evidencia que de celebrarse la audiencia en la fecha fijada desde el 27 de diciembre del 2024, se vulneren las garantías constitucionales que refiere, máxime teniendo en consideración el tiempo que ha transcurrido desde el primer llamado de indagatoria al día en que se ha fijado su materialización”, explicó el juez para rechazar el pedido. También sostuvo que Alberto Fernández puede ampliar la indagatoria cuando quiera.