En Estados Unidos, el estado de Texas fortaleció sus medidas para evitar la llegada de inmigrantes ilegales con la instalación de barreras físicas a lo largo de la frontera con México. Entre otras cosas instalarán un sistema de boyas en el Río Grande y alambre de púas en distintos cruces fronterizos.
Es por ello que las autoridades de Texas decidieron desplegar trabajadores y excavadoras en lanchas neumáticas con el fin de ampliar una barrera flotante existente cerca de la ciudad de Eagle Pass, de acuerdo a imágenes captadas por drones desde la ciudad mexicana dre Piedras Negras.
La nueva sección de boyas que se extiende aproximadamente un kilómetro forma parte de la Operación Estrella Solitaria, una política que desarrolla el Estado de Texas dede 2021 a lo largo de su frontera sur, con México.

"Espero seguir trabajando estrechamente con el presidente Trump para asegurar la frontera", declaró el gobernador texano, Gregg Abbott, a través de su cuenta de X (exTwitter), tras la instalación de las primeras boyas, días previos a la asunción de Trump como presidente.
Por otra parte, agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fonteriza (CBP) colocó los alambres de púas en cruces estratégicos, como el puente internacional Paso del Norte, Santa Fe, que conecta El Paso, Texas, con Ciudad Juárez, México
Las medidas se implementan en el contexto del segundo mandato de Donald Trump, que comenzó el pasado lunes, cuando declaró la emergencia nacional en la frontera con México "para repeler la desastrosa invasión de nuestro país".

La nueva adminstración aseguró que se volverá a la política de "Permanecer en México", que se había impulsado durante la primera presidencia de Trump, y que obliga a las personas que solicitan ingresar a Estados Unids desde México a permanecer allí hasta que se haya decidido su solicitud.
La respuesta de México ante la política anti inmigrantes
Como respuesta, las autoridades mexicanas comenzaron a prepararse para un posible aumento de las deportaciones. Tal es así que el estado de Tijuana declaró una "emergencia" para liberar fondos destinados a la atención de inmigrantes deportados, mientras que el gobierno nacional piensa instalar albergues temporales.

De todas maneras, la jefa del estado mexicano, Claudia Sheinbaum sostuvo que el país solo recibirá a deportados mexicanos, pese a que la mayoría de los migrantes actuales son venezolanos y centroamericanos. De todas maneras, Sheinbaum dijo que brindará asistencia humanitaria para los migrantes deportados de otros países.