Si las polillas te están dejando agujeros en la ropa o arruinando tus muebles, sabés lo molesto que puede ser lidiar con estas pequeñas plagas. Las polillas, que a diferencia de las mariposas son nocturnas, se caracterizan por sus antenas en forma de plumas o crestas y, en muchos casos, se convierten en una verdadera pesadilla en casa.
Pero no te preocupes, hay soluciones caseras, económicas y bastante efectivas para ponerle fin a este problema. A continuación, te dejamos algunos métodos que podés probar, dependiendo del tipo de daño que estén provocando.
1. Frascos con aceite de cedro cerca de los muebles
El aceite de cedro es otro repelente natural contra las polillas. Para usarlo, podés colocar algunos frascos con aceite cerca de los muebles que corren el riesgo de ser atacados. Asegurate de sellar bien los frascos para evitar que se derrame el aceite. Según un estudio publicado en Phytotherapy Research, este aceite tiene propiedades repelentes no solo contra polillas, sino también contra hormigas y otros insectos.
2. Rociar la ropa con alcanfor blanco y alcohol vegetal
Si las polillas están afectando tu ropa, una técnica efectiva es rociarla con una mezcla de alcanfor blanco y alcohol vegetal antes de guardarla. Es recomendable hacerlo antes de los cambios de temporada para evitar que los insectos se apoderen de tus prendas. Este remedio es económico y puede ayudar a mantener a raya a las polillas sin necesidad de productos químicos caros.

3. Bolsitas de lavanda para los armarios
Las bolsitas de lavanda no solo ayudan a mantener alejadas a las polillas, sino que también dejan un agradable aroma en tus armarios. Podés hacerlas vos mismo con tela y algunas flores secas de lavanda. Colocarlas en los rincones de los armarios donde guardás la ropa es una forma natural y efectiva de prevenir el ataque de estos insectos.
4. Cáscaras de naranja y limón contra las polillas
El olor cítrico es infalible para repeler a las polillas. Podés hacer pequeñas bolsitas con cáscaras de naranja y limón, y colocarlas en tus armarios o en los bolsillos de las prendas que usas con frecuencia. Este método no solo sirve para mantener alejados a los insectos, sino que también dejará un perfume fresco en tus ropas. Los clavos de olor también son efectivos si los colocás en los bolsillos de tus prendas.

5. Lavar las prendas a 60ºC
Si sospechás que alguna prenda está infestada, lo mejor es lavarla a una temperatura alta, alrededor de los 60ºC. Después, guardala bien envuelta en plástico para evitar que las polillas vuelvan a atacar. Este método asegura que las larvas y huevos de polilla no sobrevivan al lavado, protegiendo tu ropa de futuros daños.

¿Y si nada de esto funciona?
Si, a pesar de todos estos remedios caseros, las polillas siguen en tu casa, tal vez sea el momento de contactar a un profesional. Los especialistas pueden aplicar tratamientos físicos o químicos para erradicar la plaga de forma más eficaz, evitando que se reproduzcan y sigan causando daños.
Con estos consejos, vas a poder mantener tu casa libre de polillas sin gastar una fortuna. ¡Probalos y decile chau a los agujeros en tu ropa!