Mientras el incendio forestal en el Parque Nacional Nahuel Huapi, Río Negro, lleva consumidas más de 4.000 hectáreas, otro desastre similar se desató en Epuyén, Chubut. Decenas de personas debieron evacuarse ante el avance de las llamas sobre zonas residenciales y la superficie afectada ya ronda las 2.000 hectáreas.
El incendio forestal en Chubut se desató en la zona del lago Epuyén este miércoles, por causas que aún se desconocen. Según declaraciones del secretario de Bosques de la provincia, Tegid Evans, recogidas por la prensa local, las llamas consumieron más de 1.800 hectáreas sólo durante la jornada de ayer y las personas evacuadas superan las 60.
Además, Evans explicó que el incendio es especialmente complejo por afectar una superficie cercana a las áreas habitadas. De hecho, el fuego se desarrolló detrás de la Escuela N°9 Mariano Moreno y el cementerio municipal y ya alcanzó algunas viviendas: aunque el Municipio no pudo determinar la cantidad de casas afectadas, la prensa local indicó que fueron “decenas”. Mientras tanto, quienes no tengan a dónde evacuarse pueden acudir al Gimnasio Municipal.

Por el momento, no se registraron heridos pero tampoco indicios de que el incendio en Epuyén vaya a detenerse. “El clima no ayuda”, lamentó José Contreras, intendente de la localidad a Radio de la Cordillera.
El fuego obligó incluso a cortar la Ruta 40 entre Epuyén y el cruce con Cholila, ya que las llamas habían llegado al camino. El tramo permaneció cerrado hasta aproximadamente las 23 de este miércoles, cuando las autoridades consideraron que era seguro volver a abrirlo.
Según consignó el titular del área de Protección Civil local, Jorge Bonansea, el incendio se desarrolla en tres grandes frentes: la cabecera, el que alcanzó la Ruta 40; el flanco izquierdo, frente al pueblo; y el flanco derecho, sobre el lago Epuyén, que es el que “incrementó mucho y está subiendo al cerro” de igual nombre.
Trabajan en el lugar brigadistas de diferentes localidades aledañas y se están utilizando aviones hidrantes del Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF). El viento fue un factor decisivo para la devastadora propagación del fuego, habiéndose registrado ráfagas de 60 a 70 km por hora. Las llamas vienen arrasando con áreas de bosque implantado y también nativo, de vital importancia para el equilibrio ecológico que ya está en notorio deterioro.