El automotor se consolida como el protagonista indiscutido en el universo de los seguros en Argentina, concentrando el 95,2% de los siniestros reportados. En contraste, las motos representan apenas el 1,4%, seguidas por los seguros integrales (1,2%), los seguros de hogar (1,0%) y los de accidentes personales (0,7%). Estos datos subrayan la marcada centralidad de los vehículos en el mercado asegurador nacional.
La obligatoriedad del seguro automotor, estipulada por ley, es un factor clave que explica esta preeminencia. En un país donde la cultura aseguradora está lejos de ser generalizada, los seguros vehiculares se destacan precisamente por ser un requisito legal. Sin embargo, un dato preocupante acompaña estas cifras: un alto porcentaje de asegurados desconoce los detalles de la póliza que contrata, lo que deja expuestas posibles lagunas al momento de hacer valer sus derechos.
Tipos de siniestros del rubro automotor: ¿qué pasa en las calles?
Entre los siniestros reportados en el rubro automotor, los accidentes de tránsito lideran con un 38,8%. Este porcentaje refleja la alta incidencia de choques y otros eventos en las calles argentinas.

En segunda posición, los robos —tanto totales como parciales— representan el 19,2% de los casos. Esta cifra incluye desde el hurto completo del vehículo hasta la sustracción de partes como ruedas, espejos o baterías.
Por su parte, los daños en cristales —ya sean parabrisas, lunetas o ventanillas— concentran el 12,2% de los siniestros totales. Este último grupo resulta particularmente relevante en grandes centros urbanos, donde los actos de vandalismo y las contingencias relacionadas con el tránsito son moneda corriente.

Finalmente, aunque en menor proporción, se encuentran los daños parciales o totales por incidentes y los fenómenos meteorológicos, como granizo e inundaciones, que completan el listado con un 3,9% y un 1,6% respectivamente.
Reflexiones sobre la cultura aseguradora
Estos números no solo describen el peso del sector automotor dentro de los seguros, sino también plantean interrogantes sobre los hábitos y la conciencia aseguradora en el país. La falta de lectura y comprensión de las pólizas contratadas por parte de los usuarios sigue siendo un tema pendiente que requiere atención.

Con una marcada preponderancia del automotor en el panorama de los seguros, queda en evidencia la necesidad de promover una mayor educación aseguradora para que los ciudadanos puedan tomar decisiones más informadas y proteger su patrimonio de manera eficiente.