La decisión del Gobierno Nacional de eliminar recursos audiovisuales para la Educación Sexual Integral (ESI), tomada este jueves, sigue generando repercusiones y discusión en redes sociales y otros espacios. En línea con una medida similar tomada por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires el martes, el Ministerio de Capital Humano removió contenidos de la plataforma Educ.ar.
El martes pasado, el Gobierno de la Ciudad fue objeto de fuertes cuestionamientos por bloquear el acceso a todos los contenidos de ESI que hasta entonces se podían consultar en la web oficial. Dos días después, la administración nacional hizo lo propio bajando casi un centenar de contenidos dirigidos a distintos niveles educativos, cuyas temáticas iban desde los métodos anticonceptivos y la prevención de ETS hasta la prevención del grooming y el abuso sexual en la infancia.
A título ilustrativo, se removieron contenidos del canal Paka Paka, así como un cuento de María Elena Walsh y videos relacionados con las llamadas familias diversas, en lo que varias personas calificaron como un acto de censura. Una de las eliminaciones más resonantes en redes fue la de la canción “Hay secretos”, de la banda de música infantil Canticuénticos. Con tacto y adaptada a su público, la letra invita a las niñas y los niños a comunicarse con una adulta o adulto de confianza si están sufriendo abuso.
La justificación del Gobierno para remover contenidos de ESI
Quien pidió eliminar estos contenidos fue el subsecretario de Políticas e Innovación Educativa, Alfredo Domingo Vota, a través de una solicitud remitida al titular de la Secretaría de Educación, Carlos Horacio Torrendel. Allí, Vota argumentaba que los materiales en cuestión mostraban “un alto contenido de ideología de género” y “elementos que promueven el adoctrinamiento en las aulas”.
En diálogo con el diario La Nación, fuentes de Capital Humano se explayaron sobre quiénes tomaron la decisión sobre los contenidos. “Lo eligió un equipo que sabe lo que está bien o no para los chicos. Sólo reemplazamos los que están ideologizados”. Evitaron profundizar en cuáles fueron los contenidos eliminados y por qué razones concretas y se limitaron a remarcar que “hay gente que sabe y evalúa lo que los niños necesitan”.

Y añadieron: “Elegimos contenidos no politizados y que se apoyen en la rama biológica, que es la familia. Después, en sus casas, que las familias les enseñen los que se le canta, pero el Estado en esas cosas no se mete”. Este pronunciamiento despertó numerosas críticas, sobre todo alusivas al hecho de que lo que está “politizado” o “ideologizado” también lo están definiendo personas con una posición política e ideológica determinada. De igual manera, el concepto de familia está atravesado por cargas simbólicas, culturales e ideológicas.
En este sentido, algunas académicas y activistas recordaron que la gran mayoría de los abusos sexuales en la infancia son precisamente intrafamiliares y que, según mediciones oficiales, desde la implementación de la ESI se redujeron notoriamente los embarazos adolescentes y aumentaron las denuncias de abuso sexual.