El comienzo de un año nuevo es un momento cargado de simbolismo, una pausa perfecta para reflexionar sobre el camino recorrido y para proyectar deseos hacia el futuro. En muchas partes del mundo, la llegada del 1 de enero suele estar acompañada de rituales y tradiciones que buscan limpiar energías y atraer prosperidad. Y aunque el festejo porteño típico incluya brindar con sidra y ver fuegos artificiales, también podemos incorporar prácticas ancestrales que nos conecten con lo espiritual.
Desde la quema de hierbas aromáticas hasta la siembra simbólica de deseos, muchas culturas han desarrollado rituales que nos ayudan a empezar el año. Estos cinco rituales que compartimos a continuación están inspirados en tradiciones de diversas partes del mundo y son ideales para quienes buscan recibir el 2025 con energías renovadas.
Cinco rituales ancestrales para año nuevo
1. Limpieza energética del hogar
Objetivo: Eliminar energías negativas y abrir espacio para lo nuevo.
Este ritual, inspirado en tradiciones indígenas y asiáticas, consiste en purificar los espacios que habitamos para despejar todo lo que no queremos llevar al año nuevo. Necesitás hojas de laurel, romero o salvia seca, un recipiente resistente al calor y fósforos. En primer lugar, abrí las ventanas y encendé las hierbas. Dejá que el humo se expanda por cada rincón de tu casa mientras repetís afirmaciones positivas como: "Dejo ir lo viejo y recibo lo nuevo con amor y abundancia." Al finalizar, agradecé por las bendiciones recibidas y asegurate de ventilar bien el espacio.

2. Baño de purificación y atracción
Objetivo: Purificar el cuerpo y atraer abundancia para el año nuevo.
Inspirado en rituales afrodescendientes y europeos, este baño especial te ayuda a renovarte. Prepará agua tibia y agregá sal marina, pétalos de flores (rosas o girasoles) y unas gotas de aceites esenciales como lavanda o cítricos. Sumergite o enjuagate con esta mezcla mientras visualizás cómo te despojas de energías negativas. Al salir, vestite con ropa clara.
3. Encendido de velas para intenciones
Objetivo: Manifestar deseos y energías positivas.
Este ritual, de raíces celtas y latinas, utiliza velas de colores para representar diferentes aspectos de la vida: blanca para la paz, verde para la salud, amarilla para la abundancia y roja para el amor. Escribí tus intenciones en papeles pequeños, colocá las velas en un círculo y ubicá los papeles en el centro. Encendé cada vela mientras expresás en voz alta tus deseos para el año nuevo y visualizá cómo se materializan.

4. Siembra de deseos
Objetivo: Conectar con la naturaleza y sembrar proyectos.
Tomando inspiración de tradiciones indígenas americanas, este ritual combina lo simbólico con lo concreto. Necesitás una maceta, tierra fértil y semillas de hierbas, flores o alimentos. Escribí tus metas en un papel, colocá el papel en el fondo de la maceta, cubrilo con tierra y sembrá las semillas. Al regarlas, agradecé por las oportunidades que traerá el año nuevo. Cuida la planta como un recordatorio del crecimiento de tus intenciones.
5. Rueda de agradecimientos y proyección
Objetivo: Honrar lo vivido y proyectar deseos colectivos.
Este ritual, de origen andino, se realiza en grupo. Reuní a familiares o amigos en un círculo y colocá en el centro objetos simbólicos como piedras, flores o velas. Cada persona agradece algo del año que termina y comparte un deseo para el que empieza. Al final, unan las manos y visualicen juntos un año lleno de armonía y bienestar.

Incorporar estas prácticas al festejo de año nuevo no solo suma un toque especial, sino que también nos ayuda a conectar con nosotros mismos y con los demás.