Muchos tienen la costumbre de imprimir el ticket del cajero automático después de sacar plata o consultar el saldo. A pesar de ser algo común, la realidad es que esta práctica puede poner en riesgo tu seguridad financiera. Sí, ese papelito que a veces tiramos al tacho puede convertirse en un peligro si cae en las manos equivocadas.
¿Por qué es peligroso imprimir el ticket en el cajero automático?
El ticket incluye datos clave sobre tu cuenta: el saldo restante, información vinculada a tu tarjeta y, en algunos casos, hasta detalles que podrían usarse para un fraude. Lo más común es que muchos usuarios impriman el comprobante y lo dejen tirado en los tachos de basuras del banco o, peor, lo abandonen cerca del cajero automático.
Los delincuentes pueden aprovecharse de esta información para cometer estafas, vaciar cuentas o incluso suplantar tu identidad. Según expertos en ciberseguridad, esos datos, combinados con otros que puedan obtener, son suficientes para meterse en problemas serios.
Qué recomienda el BCRA
El Banco Central de la República Argentina (BCRA) y los expertos en seguridad recomiendan directamente no imprimir el ticket. Si necesitás el comprobante, es mejor optar por alternativas digitales, como el home banking, donde podés guardar la información de manera segura y sin riesgos de extravío.
Si igual decidís imprimirlo, nunca lo tires a la basura sin destruirlo primero. Una forma simple de protegerte es romper el ticket en varios pedazos o usar una trituradora de papel.
Otras recomendaciones para usar el cajero automático con seguridad
Además de evitar la impresión del ticket, hay varias medidas que podés tomar para proteger tu plata y tus datos:
- Chequeá el cajero: si notás algo raro, como dispositivos extraños o pantallas mal configuradas, buscá otro.
- Cambiá tu clave regularmente: no la compartas con nadie y, si podés, usá una combinación difícil de adivinar.
- Activá alertas de consumo: esto te permitirá detectar cualquier movimiento raro en tu cuenta al instante.
Muchos usuarios todavía se manejan con efectivo y ven al cajero como una herramienta imprescindible. Sin embargo, adoptar prácticas más seguras, como consultar saldos desde el celular o guardar los comprobantes de manera digital, es algo sencillo que puede ahorrarte dolores de cabeza.
Si bien imprimir un ticket parece inofensivo, es mejor prevenir que lamentar. Cuidá tus datos como cuidás tu plata. Y recordá: ante cualquier duda o irregularidad, comunicate directamente con tu banco para evitar caer en manos de estafadores.