Iniciar el fuego para un asado en la parrilla es una de las habilidades más valoradas en la cocina argentina. Ya sea un encuentro con amigos o una comida en familia, el proceso de encender el fuego correctamente es clave para garantizar una cocción perfecta.
Si bien existen métodos tradicionales como el uso de la chimenea o el encendido de leña con papel, una alternativa más práctica y económica es utilizar cartón de huevo, aceite y carbón o leña.
En esta guía te explicamos paso a paso cómo hacerlo, para que puedas disfrutar de un asado con ese sabor único que solo una parrilla bien encendida puede ofrecer.
@laparradedios INICIADOR DE FUEGO 🔥 Junto a @Somos BBQ queremos que cada vez más gente se sume a hacer asado, por eso les enseñamos esta técnica que es INFALIBLE 💪 . Y USTEDES COMO LO PRENDEN⁉️ . . . #asado #bbq #fuego #carne #parrilla #argentina ♬ sonido original - Maxi V - Cumbia y Más 🤙🎬🎶
Parrilla: cómo hacer un iniciador de fuego casero súper fácil para el asado
- Un maple de huevo vacío (de cartón)
- Aceite (puede ser aceite de cocina común o, si prefieres, aceite vegetal)
- Carbón o leña (preferentemente carbón para un fuego más rápido, pero también podés usar leña si buscas un sabor más tradicional)
- Fósforos o encendedores (para prender el fuego)
- Recipiente para el aceite (puede ser un pequeño recipiente o botella de plástico)
Paso 1: preparar el maple de huevo
El cartón de huevo es un excelente material para encender fuego, ya que es liviano y se prende rápidamente. Agarrá un maple de huevo vacío y colócalo en el centro de la parrilla, dentro de la zona donde quieras iniciar el fuego.
El cartón de huevo tiene la ventaja de ser un material poroso que, al prenderse, generará calor rápidamente. Si lo preferís, podés desarmar el cartón en partes más pequeñas, lo que aumentará la superficie expuesta y hará que el fuego se inicie más rápido en la parrilla.
Paso 2: agregar aceite
Una de las claves para asegurar que el fuego se encienda rápidamente es utilizar un poco de aceite. Este combustible ayudará a que el cartón arda con mayor intensidad. Poné un poco de aceite (aproximadamente 2 a 3 cucharadas) sobre el cartón de huevo. No es necesario que sea una gran cantidad, pero sí lo suficiente como para humedecer ligeramente el cartón.
Si no tenés aceite a mano, también podés usar grasa animal (si la tenés de algún asado anterior) o incluso cera de velas. Sin embargo, el aceite común es la opción más accesible y eficaz.
Paso 3: colocar el carbón o la leña
Una vez que tienes el cartón listo con el aceite, es hora de agregar el carbón o la leña. Si usás carbón, colócalo alrededor del cartón, formando una pequeña montaña de carbones. Asegúrate de dejar suficiente espacio entre los carbones para que el aire circule. Si optás por leña, podés colocar las ramitas más finas en el centro para ayudar a que el fuego se propague hacia los troncos más grandes.
Paso 4: prender el fuego
Ahora llega el momento crucial: prender el fuego. Con un fósforo largo o encendedor, encendé el cartón de huevo por uno de los bordes. A medida que el cartón comienza a arder, el aceite hará que el fuego se propague rápidamente, prendiendo los carbones o la leña que rodean el cartón. Es importante no sofocar el fuego con demasiado viento o intentar apagarlo antes de que se estabilice.
Dejá que el fuego se propague durante unos minutos, hasta que el carbón se cubra con una capa de ceniza blanca, lo que indica que está en su punto para cocinar. En el caso de la leña, el proceso será más lento, pero el resultado será un fuego más intenso y duradero.
Paso 5: controlar la temperatura
Una vez que el fuego esté encendido y el carbón esté bien caliente, podés empezar a ajustar la cantidad de leña o carbón en la parrilla para mantener una temperatura constante. Si buscás una cocción lenta y uniforme, es preferible mantener el fuego a una temperatura baja, moviendo las brasas de un lado a otro.
¿Qué tener en cuenta?
- No uses materiales plásticos o de tinta para encender el fuego, ya que pueden liberar sustancias tóxicas.
- Controlá el fuego: no dejes que se apague o se sobrecaliente. Para ello, siempre es útil tener cerca una pala o tenedor para mover las brasas y ajustar la temperatura.
- Esperá que el carbón esté bien encendido antes de colocar los cortes de carne en la parrilla. Esto garantizará una cocción adecuada y evitará que la carne se queme por fuera y quede cruda por dentro.
Con estos simples pasos, podés encender un fuego perfecto para tu próximo asado, sin complicaciones y utilizando materiales accesibles.