El expresidente de Perú que pasó 16 años preso, Alberto Fujimori, murió este miércoles de cáncer en Lima a los 86 años. Así lo confirmó su hija, Keiko Fujimori.
Alberto Fujimori había sido liberado hace nueve meses del penal de Barbadillo, donde estuvo 17 años por la condena que recibió por dos matanzas durante su gobierno, entre 1991 y 1992. El año pasado, recibió un indulto humanitario por los distintos problemas de salud que tenía.
El expresidente de Perú, que ocupó el cargo entre 1990 y 2000, enfrentó múltiples problemas de salud desde su ingreso a prisión en 2007. En 2017, durante la presidencia de Pedro Pablo Kuczynski, recibió un indulto, pero tuvo que volver a la cárcel debido a alegaciones de irregularidades en el proceso. Finalmente, el año pasado, el Tribunal Constitucional de Perú decidió otorgarle un nuevo indulto, permitiéndole pasar sus últimos meses de vida en la residencia de su hija.
Fujimori tenía distintos problemas de salud, como cáncer de lengua, fibrilación auricular, dolencias pulmonares e hipertensión. Según trascendió, su salud se deterioró muchísimo la última semana, luego de concluir un tratamiento de radioterapia en la boca, informaron fuentes allegadas a la familia a la agencia AFP.
"Después de una larga batalla contra el cáncer, nuestro padre, Alberto Fujimori acaba de partir al encuentro del Señor. Pedimos a quienes lo apreciaron nos acompañen con una oración por el eterno descanso de su alma", escribió Keiko Fujimori. El breve comunicado llevó la firma, además, de Kenji, Sachie e Hiro, los otros hijos del expresidente de Perú.
La Gestión de Alberto Fujimori: Autoritarismo y Corrupción
Alberto Fujimori dirigió Perú desde 1990 hasta 2000. Su presidencia estuvo marcada por un autoritarismo notable y graves acusaciones de corrupción. En 2004, el Informe Global sobre la Corrupción, elaborado por Transparencia Internacional, lo ubicó como el séptimo líder más corrupto de un listado de diez presidentes con mayores cargos de corrupción. La organización calculó que durante su mandato, Fujimori malversó alrededor de 600 millones de dólares.
El 5 de abril de 1992, Fujimori llevó a cabo un autogolpe de Estado con el respaldo del ejército, disolviendo el Congreso y tomando el control de los poderes judiciales. Fue reelegido en 1995 y su gobierno terminó en 2002.
En cuanto a su modelo económico neoliberal, este recibió el apoyo de empresarios, élites y organismos financieros internacionales, permitiéndole superar la crisis económica que Perú enfrentó durante el primer mandato del socialdemócrata Alan García (1985-1990).
Fujimori también logró derrotar a las guerrillas de Sendero Luminoso y al Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA), aunque organizaciones de derechos humanos denunciaron la ejecución de civiles inocentes. Uno de sus momentos de mayor impacto político fue la liberación de rehenes en la residencia del embajador japonés en abril de 1997, tras una acción del MRTA.
La Sentencia a Alberto Fujimori por Crímenes de Lesa Humanidad
En 2009, Alberto Fujimori fue sentenciado a 25 años de prisión por su responsabilidad en "crímenes contra la humanidad" relacionados con las masacres de Barrios Altos y La Canuta. En estos eventos, el ejército, bajo su mandato, asesinó a 25 personas.
Estas violaciones a los derechos humanos fueron un componente oscuro de su administración. En 1991, quince personas, incluido un niño de ocho años, fueron asesinadas en Barrios Altos. Al año siguiente, en 1992, el ejército secuestró y mató a nueve estudiantes y un profesor de la Universidad de La Canuta.