Los paracaidistas argentinos Marcelo Vives y Alejandro Montagna rompieron un récord mundial consiguiendo el salto nocturno en caída libre más alto de todos los tiempos. Ambos trabajaron en esto durante más de un año. Luego de una gran inversión y mucho esfuerzo lograron desde una altitud de 13 mil metros.
Minutos después de aterrizar, Alejandro confesó: "Fue muy zarpado. Tengo 4500 saltos, pero esto supera todos los hechos hasta hoy. Fue muy intenso, el frío, la velocidad, la máscara de oxígeno, el tiempo de caída libre".
"Al principio, durante el primer minuto, Marcelo y yo no sabíamos si estábamos sobre la zona de aterrizaje o no. La visual era muy confusa desde tanta altura. Igual ya no había nada que hacer. Pero Taylor (el tercero de los paracaidistas) que conoce muy bien la zona, rápidamente identificó las luces de una prisión grande que está a unos 5 km, y al sur de eso vio las balizas de rescate marino que habíamos puesto sobre la pista", añadió.
De esta forma, los paracaidistas argentinos consiguieron esta madrugada, en Estados Unidos, superar la marca mundial de salto Nocturno a Gran Altitud. Cabe destacar que el récord anterior lo poseía Andy Stumpf, quien el 26 de enero de 2019 se arrojó desde una altitud de 10.973 metros.
Los argentinos abordaron el avión junto a los pilotos Mike Turner y Mike Mullins, quien es director nacional de la Asociación Norteamericana de Paracaidismo. También estuvieron los expertos en oxigeno de gran altitud, Thomas Oquinns y Paul Gholson; y el juez de la Federación Internacional de Aviación, Scott Callantine, quien certificó eventualmente la nueva marca global.