El juez Gustavo Hornos fue denunciado por violencia de género por su expareja y la justicia ordenó la prohibición de acercamiento y contacto con la víctima por parte del magistrado. El caso tuvo un fuerte impacto en la Cámara Federal de Casación Penal y podría llegar al consejo de la magistratura.
No es la primera vez que acusan de algo así a Gustavo Hornos ya que en el pasado había sido denunciado por otra ex pareja por violencia doméstica, sin embargo, fue sobreseído. En esta nueva denuncia, la víctima prestó declaración ante la Oficina de Violencia Doméstica que depende de la Corte Suprema. La justicia civil tuvo que intervenir y el 2 de septiembre se le prohibió al camarista acercarse a la víctima y tener cualquier tipo de contacto con ella.
La decisión fue por “la entidad de los hechos denunciados, lo que surge del informe interdisciplinario de situación de riesgo, y demás constancias de autos”. También había sido denunciado junto a su colega Mariano Borinsky por visitar al expresidente Mauricio Macri tanto en la Casa Rosada como en la quinta de Olivos en la previa o luego de firmar fallos claves para el macrismo.
Quien está a cargo de la causa por violencia de género es la jueza civil Paula Marinkovic del juzgado civil Nº 12. “Ordenar por el plazo de 90 días y en carácter de medida precautoria, la prohibición de acercamiento y contacto de Gustavo Hornos, a un radio inferior de 200 metros”, dispuso Marinkovic.
Hornos también deberá cortar "todo tipo de contacto físico, telefónico, de telefonía celular, de correo electrónico, por vía de terceras personas y/o por cualquier medio que signifique intromisión injustificada con relación a la denunciante".
La Cámara de Casación aún no adoptó ninguna decisión administrativa hasta tanto sea notificada oficialmente del asunto. Fuentes del tribunal dijeron que por el momento no hay motivo para tomar alguna decisión contra Gustavo Hornos.