Pese a que la votación de la nueva fórmula de movilidad jubilatoria fue abrumadora - 61 a favor contra 8 en contra-, en el gobierno están decididos a vetar la ley aprobada por el Senado.
Así lo aseguró el presidente el viernes con encendidas declaraciones- “degenerados fiscales que hacen populismo y condenan a Argentina a la ruina”- y lo ratificó hoy Manuel Adorni, quien negó cualquier voluntad de negociación. “El veto va a ser total, no hay ningún tipo de negociación. La decisión está tomada”, dijo.
Respecto del tiempo que se tomará el jefe de Estado para tomar una determinación, Adorni explicó que “no sé si va a estar esta semana o no, hay 10 días hábiles para proceder al veto, eso son 15 días de corrido. Veremos cómo avanza administrativamente y en el proceso burocrático la decisión del Presidente”.
“El trasfondo de todo esto es el intento de romper el equilibrio fiscal. La gravedad es evidente cuando proponen un gasto y sin contrapartida de recursos. No hay otra razón que no sea romper con el equilibrio de las cuentas públicas”, añadió el vocero.
No hay otra razón que no sea romper con el equilibrio de las cuentas públicas
Respecto de otros temas económicos, Adorni reconoció la fuerte recesión que denuncian los gremios industriales: “La industria es el sector que todavía está más retrasado en el proceso de la recuperación, eso es un dato objetivo y que le prestamos atención, como también entendemos que dentro de la industria (que va desde producción de acero o patentamiento de autos o producción de autos o despachos de cemento) empieza a haber semáforos positivos también”.