El presidente Javier Milei anunció que el veto a la nueva fórmula de aumento de las jubilaciones "será completo" y lo justificó asegurando que, de mantenerse en pie, la ley significará "el hundimiento definitivo en la pobreza y la indigencia a los jóvenes y futuras generaciones".
"Lo primero que hay que tener en cuenta es el error conceptual. Es verdaderamente gracioso que el kirchnerismo se ocupe de los jubilados cuando licuaron las jubilaciones en un 30% y hoy en términos reales están 5% por encima de las que eran diciembre cuando asumimos", comenzó diciendo el jefe de Estado, en diálogo con LN+.
En este sentido, agregó: "¿Por qué lo quieren hacer ahora, acaso quieren romper este Gobierno? No tengo dudas, quieren romper este Gobierno porque si le va bien va a significar que los argentinos van a estar mejor y estas ratas no vuelven más".
Milei fue drástico sobre las consecuencias que, según él, le traerá al país la nueva ley jubilatoria si es que la oposición avanza en el Congreso y deja sin efecto su veto, cosa que está habilitado a hacer debido a que la propuesta consiguió más de los dos tercios de los votos en ambas cámaras.
"El aumento que deriva de esta ley implica un aumento del costo en términos del PBI de 1,2. Pero no es solamente un aumento que usted tiene un año, es de acá a la eternidad. Para una economía cuya tasa de interés promedio está en el 5%, implica que acaban de subir la deuda 24 puntos del PBI", señaló Milei.
En esta línea, afirmó que "la medida demagógica que votó el Senado ayer implica un incremento de la deuda de 370.000 millones de dólares". En este punto, fue mucho más extremo al considerar que la ley significará "el hundimiento definitivo en la pobreza y la indigencia a los jóvenes y futuras generaciones", ya que es "un atentado contra el bienestar de los argentinos" y la "ruina del país".
Milei había confirmado que vetará la nueva ley después de una reunión que mantuvo con Luis Caputo, Federico Sturzenegger, José Luis Espert y una docena de economistas del Gobierno en Olivos. Al anunciar la decisión de vetar la ley aprobaba en el Senado, el oficialismo había insistido en la idea de que “tiene como único objetivo destruir el programa económico del Gobierno”.