Argentina dejará de importar gas natural desde Bolivia en los próximos meses, en lo que es el fin del contrato que firmaron hace 18 años los expresidentes Néstor Kirchner y Evo Morales. De esta manera, el acuerdo entre los entonces mandatarios entró en vigencia el 1 de enero de 2007 e iba a durar 20 años, hasta el 31 de diciembre de 2026.
En ese período de tiempo, nuestro país gastó casi 20 mil millones de dólares en esas importaciones. Ahora, gracias a Vaca Muerta y dos obras estratégicas para el transporte de gas, el acuerdo quedará de lado.
En este sentido, la reversión del Gasoducto Norte avanza y está a punto de finalizarse, en algunas etapas. El mismo actualmente transporta el combustible desde Bolivia. Sin embargo, con la reversión de su flujo, tendrá la posibilidad de llevar el gas argentino a 7 provincias del norte y además ser una vía para las exportaciones a Brasil.
Las empresas Techint y Sacde terminaron hace poco tiempo la construcción de 100 kilómetros del Gasoducto de Integración Federal, que conectará las localidades de Tío Pujio y La Carlota, en Córdoba. Además, se lo entregarán a la empresa pública Energía Argentina (Enarsa).
“Durante la construcción del ducto se alcanzó un promedio de 3km diarios de avance en la cuadrilla de soldadura ejecutadas en un solo frente, alcanzando un récord para este tipo de proyectos. Este hito fue posible gracias a tecnologías como la soldadura automática y la planta de doble junta, entre otras, que permitieron reducir los tiempos de ejecución”, remarcaron desde las empresas que construyeron el mencionado gasoducto.