Un hombre de 36 años intentó robar un Pago Fácil en Ituzaingó y fue detenido a metros de conseguir su objetivo. Intentó hacer un boquete en la pared, pero lo agarraron porque martilló durante la madrugada, esto hizo saltar la alarma y los vecinos lo denunciaron. Es el tercer robo bajo esta modalidad, los otros dos son el túnel en San Isidro y el boquete descubierto ayer en un edificio en Rosario.
La policía entró al Pago Fácil en Ituzaingó con una orden ya que el local estaba cerrado. Ingresaron por la puerta trasera y encontraron al ladrón agazapado y escondido debajo de una escalera en medio de la oscuridad, estaba acompañado de dos bolsos con herramientas para poder hacer el boquete como martillo, maza, cortafierros, taladros y destornilladores.
La policía lo identificó como Omar Esteban Brinville, un hombre de 36 años con condenas previas por delitos diversos. “No llegó a perforar la pared, pero no le faltaba mucho tampoco. Sospechamos que accedió por lo que fue durante muchos años una inmobiliaria y ahora es una propiedad en venta. Ingresó por los techos y estuvo un buen tiempo dentro”, confirmó una fuente al medio local Primer Plano.
El caso del Pago Fácil en Ituzaingó quedó a cargo del fiscal Marcelo Tavolaro, de la Fiscalía Descentralizada 1 de Ituzaingó e imputó al ladrón por "delito de robo agravado por haberse perpetrado con escalamiento en grado de tentativa". Se espera por el testimonio del acusado y se sospecha que no habría sido el único implicado en el trabajo de robo. En menos de un mes se registraron tres robos bajo esta modalidad.
La policía confirmó que el Pago Fácil en Ituzaingó está ubicado en la calle Juncal al 100, entre Mansilla y Zufriategui. Lo llamativo es que el local, además de estar en el centro, se encuentra a tres cuadras de la Comisaría 1ra.
El primero fue el caso del túnel en San Isidro donde intentaron entrar a una sucursal del banco Macro cavando un camino subterráneo de 100 metros. En este caso fueron descubiertos porque, mientras los autores del hecho trabajaban en el túnel, una varilla atravesó el empedrado y golpeó la parte de abajo de una camioneta despertó las sospechas del conductor.
El segundo caso es más parecido al del Pago Fácil en Ituzaingó ya que un grupo de delincuentes alquiló un departamento para entrar en oficinas comerciales a través de un boquete en la pared y así robar elementos. Sin embargo, un error de cálculo hizo que agujero saliera al hueco del ascensor, recalcularon y pudieron entrar, pero al momento de dar el golpe sonó la alarma y tuvieron que huir.