Ucrania realizó un ataque en la provincia rusa de Kursk que culminó con la destrucción de un puente sobre el río Seim, en el distrito de Glushkovsky. El hecho se conoció a partir de la publicación de un video por parte del comandante de la Fuerza Aérea ucraniana, Mykola Oleshchuk.
"La aviación de la Fuerza Aérea de Ucrania participa activamente en las operaciones de combate en el sector de Kursk. Los pilotos ucranianos están realizando ataques de precisión contra las fortalezas del enemigo, las concentraciones de equipos, así como contra los centros logísticos y las rutas de suministro del enemigo", afirmó Oleshchuk.
La destrucción del puente fue confirmada también por el gobernador ruso interino de la región, Alexey Smirnov. El canal ruso Telegram Mash aseguró que unos 30 asentamientos cerca de la aldea de Glushkovo, aproximadamente a 150 kilómetros de Kursk, quedaron “aislados” debido al ataque.
Las fuerzas ucranianas ahora estarían apuntando contra los otros dos puentes dentro del distrito de Glushkovsky, en un intento de apoderarse de parte de la región de Kursk a lo largo del río, con el objetivo de impedir una posible contraofensiva rusa.
Funcionarios ucranianos aseguran que la incursión no tiene como objetivo capturar territorio ruso sino proteger las vida de los ucranianos, impidiendo ataques transfronterizos y desviando los refuerzos de las fuerzas provenientes de Rusia.
Mientras tanto, Moscú continúa su avance cerca de las regiones de Pokrovsk y Toretskm, en el este de Ucrania, por la que la situación dentro de la zona sigue siendo grave.