El texto puso sobre la mesa el malestar del campamento que conduce Miguel Ángel Pichetto con el presidente Javier Milei, por sus agresiones a todo aquel que no coincide con su mirada. Pero, sobre todo, el enojo que venían masticando por los ataques del libertario contra el Bulldog en medio de la delicada situación de salud de su hija.
Lo más llamativo del comunicado, que incluyó un durísimo párrafo contra el Presidente, tuvo como autor intelectual al mismísimo Pichetto. Es decir, a quien suele mostrarse como el garante de la gobernabilidad –gobierne quien gobierne— y mantener buenos tratos con el oficialismo.
(El rionegrino se encontraba en cama, con un cuadro gripal, al momento de proponer el párrafo fulminante. Algunos compañeros de bloque prefieren no ilusionarse con la decisión. Temen que las defensas bajas le hayan jugado una mala pasada al exsenador y que, una vez recuperado, retome su postura anterior.)
“Esperamos que el Presidente demuestre empatía y respeto, y pida las disculpas públicas que Ricardo merece”, reza el texto. “Empatía”, sobre todo, porque mientras la hija de López Murphy se encontraba en una situación de salud cada vez más delicada, el mandatario lo trataba de “traidor” y “fracasado” en público.
¿Milei estaba al tanto de la situación y, aun, así lo agredía públicamente? Si no lo estaba, ¿nadie de su entorno le avisó? En los pasillos del Congreso, el asunto era más que sabido.
Martín Menem, en la mira
Las fuertes palabras en el comunicado son solo la punta del iceberg. El malestar que hay en el bloque de Pichetto con el oficialismo va en ascenso. En las últimas semanas se sumaron fuertes críticas y enojos con Martín Menem, presidente de la Cámara de Diputados. Hacemos Coalición Federal lo acusa de romper acuerdos y, para colmo, no tener argumentos sólidos a la hora de explicar sus marchas atrás.
El detonante fue la comisión bicameral de Inteligencia, nada menos que el cuerpo que actuará como contralor de la flamante SIDE (lo cual implica tener acceso a cuestiones tan delicadas como el uso de los “fondos reservados”). Si bien Menem lo niega, en HCF aseguran que el riojano se había comprometido a que uno de los 14 lugares sería para el expresidente de la Cámara: Emilio Monzó.
Pero, cuando la presentación del DNU que reestructuró la secretaría de inteligencia era inminente, hubo un golpe de timón. La Libertad Avanza decidió quedarse con ese lugar, excluyendo al diputado de Hacemos.
“Monzó no tiene senadores ni gobernadores”, recalcaron a Diario con Vos desde el entorno del riojano, restándole importancia al enojo por parte de Hacemos. Aseguraron que las prioridades de LLA pasan por mantener buenos vínculos con la UCR y el PJ, que sí tienen senadores y gobernadores.
Es más, ante los cuestionamientos de HCF hacia Menem, sus laderos responden: “Es obvio que le van a pegar a Martín, si les saca todos los contratos”.
Cuando el enojo del bloque de Pichetto trascendió, en el entorno de Menem aseguraron que le hicieron una “propuesta superadora” a Monzó. Pero la duda es: si no rompieron ningún acuerdo con el diputado, ¿por qué le hicieron una propuesta superadora? ¿Superadora respecto de la silla en la bicameral que dicen que no le habían prometido?
Lo curioso es que esa “propuesta superadora” – que el oficialismo niega pero que diferentes fuentes de HCF confirman— habría sido ofrecerle a Monzó la presidencia de una de las comisiones bicamerales que todavía no se constituyeron. Pero, antes de que le detallaran cuál, el bonaerense habría declinado la oferta.
(Dato: presidir una comisión bicameral significa tener más contratos que ser un miembro raso. Si Monzó estuviera enojado con Menem porque “les sacan los contratos”, como dicen en el entorno del riojano… ¿por qué habría rechazado una propuesta que le implicaría hacerse de contratos?)
Como fuere, mientras en el oficialismo insisten con que no hay intención de generar ruidos con el bloque de Pichetto, en la bancada dialoguista la percepción es bien distinta.
“El bloque se está corriendo para el lado de los socialistas y (Natalia) De la Sota”, describió una fuente de ese espacio. Es decir, hacia el sector más opositor que registra la bancada variopinta.
Larga lista de reclamos
Este corrimiento al ala opositora –aseguran– no tendría que ver solo con los lugares en las comisiones. “El ejemplo es que Emilio no acepta la presidencia de la bicameral que ofrece Menem, que si fuera en términos de contratos, es más conveniente”, dijeron en Hacemos.
Sino que apuntan contra el oficialismo por “incumplir la letra de la ley sobre Ganancias al momento de reglamentarla; negarles a los jubilados la recomposición del 8%, diciendo que ‘no hay plata’, mientras gastan $ 100.000 millones en la SIDE o compran aviones”.
“Hay un hartazgo generalizado frente a un Gobierno que no sólo destrata a quien piensa distinto o plantea diferencias, sino que incumple su pacto electoral de austeridad y malgasta recursos en medio de un ajuste brutal”, agregaron.
A propósito de la reglamentación de Ganancias, el diputado Nicolás Massot alertó que esta “contradice lo sancionado en la ley respecto de la indexación excepcional que se introdujo y que ocurrirá en septiembre solo por esta vez y perjudica en un 18.5% a los trabajadores”. En concreto, “se comieron” tres meses de indexación, por lo que más trabajadores se verán alcanzados por el gravamen. Por eso, Massot está trabajando en una presentación judicial para avanzar con la corrección del tema (si el Ejecutivo no lo hace).
De cara a la segunda parte del año parlamentario, en el campamento pichettista auguraron que comenzarán a plantear “límites más firmes y menos concesiones frente al incumplimiento serial de los acuerdos”.
“No es que van a pasar a ser Unión por la Patria, pero ya no van a tener la misma predisposición que antes”, avisaron.
La gran duda es cómo le sentará la recuperación a Pichetto: ¿se mantendrá en modo opositor o el dardo contra Milei fue por culpa de la gripe?