El Gobierno de Javier Milei decidió desempolvar Avenida de las Camelias, una histórica marcha militar, como banda de sonido de su gestión. Pasó ayer en los festejos por el Día de la Independencia, en el día de su asunción y en cada acto del presidente, como en el encuentro con la generala estadounidense Laura Richardson, jefa del Comando Sur.
Avenida de las Camelias es una marcha militar que en el 2025 cumplirá los 110 años, pero que se vincula fuertemente con la dictadura. De hecho, fue la música que sonó de fondo en la madrugada del 24 de marzo de 1976 durante el anuncio del derrocamiento de Isabel Martínez de Perón.
La historia de Avenida de las Camelias
La marcha fue creada por el Capitán de la Banda Sinfónica de la 6ta División del Ejército Argentino Pedro Maranesi. El autor le puso ese nombre inspirado en unas maniobras militares en el Paso del Durazno en Rosario de la Frontera y tuvieron que abrir una calle, presumiblemente con flores del género Camellias.
Este hecho inspiró a Maranesi que compuso esta marcha instrumental sobre el parche de un bombo. Tiene a las trompetas llevando adelante la melodía y su ritmo fuerte y penetrante la convirtió en una de las marchas más elegidas por las Fuerzas Armadas para interpretar en desfiles y actos ceremoniales.
Tan popular se convirtió Avenida de las Camelias en el rubro marchas militares que bandas musicales de otros ejércitos la utilizan en su repertorio, como es el caso de Alemania y Polonia.
La marca y la dictadura militar
Ya mencionamos que Avenida de las Camelias fue la marcha elegida para que suene de fondo en el anuncio del derrocamiento de Estela Martínez de Perón, pero también se convirtió en la banda de sonido de una época para muchos.
Según cuenta el escritor Abel Gilbert en su libro Satisfaction en la ESMA: música y sonido durante la última dictadura, la marcha era utilizada en como una suerte de alarma para los comandos. “Cada vez que se escuchaba la marcha, los comandos volvían a patrullar”.
Gilbert escribe: “La ocupación del espacio territorial fue mediada por esa pulsación. No se trataba de una música de efemérides ni situada en una plaza de armas: era pura interferencia del espectro y el tiempo histórico. En las pantallas televisivas apenas se exhibió una placa con el símbolo de las tres fuerzas. La heráldica, con sus alas, el sable corvo y un ancla en aspa, reforzaba su elocuencia guerrera que venía a través de los bronces y los parches".
Una de las imágenes más representativa de la Primera Junta Militar es de un desfile frente a la Casa de Gobierno, en 1977. En esos actos solían tocarse marchas militares, y "Avenida de las Camelias" era infaltable.
Avenida de las Camelias al cine
La marcha aparece en reiteradas escenas de Los Colimbas se Divierten, un clásico del cine nacional protagonizada por Alberto Olmedo y Jorge Porcel, dirigida por Enrique Carreras. En la película, Avenida de las Camelias aparece permanentemente para ridiculizar la vida en los cuarteles militares.
Los Colimbas se divierten trata de dos infractores (los señores Pumba y Colifo) que desertaron al servicio militar y son obligados a hacer la conscripción más tarde. Allí se suceden una serie de situaciones risueñas.
Una de las tantas particularidades de esta película es que fue filmada durante el juicio a las juntas y estrenada un par de meses después. De hecho, el lanzamiento fue el 17 de febrero de 1986, dos meses después de conocerse la sentencia a los militares.