A los 89 años murió Gregorio Pérez Companc, dueño de la cuarta fortuna de la Argentina valuada en 3.900 millones de dólares según el ranking de la revista Forbes. El propietario de la alimenticia más grande del país, Molinos Río de la Plata, tenía un delicado estado de salud que no había trascendido públicamente. Fuentes cercanas a la familia confirmaron su fallecimiento.
Apodado como "Goyo", en el mundo empresarial, nació en Buenos Aires en 1934 como producto del matrimonio humilde de Benito Bazán y Juana Emiliana Molina, que decidió darlo en adopción cuando tenía 11 años. Lo adoptaron Ramón Pérez Acuña y Margarita Companc. Estudió en el Colegio La Salle y se casó con María del Carmen Sundblad Beccar Varela en 1964, con quien tuvo ocho hijos.
La carrera empresarial de Gregorio Pérez Companc empezó en la década de 1940 cuando su familia adquirió una empresa naviera. Tras la muerte de su hermano Carlos, Goyo asumió el control de la empresa y también se desempeñó como titular del Banco Río de la Plata y de SADE S.A.
Con el tiempo, sus inversiones se diversificaron y consolidaron bajo el Grupo PeCom, que hoy en día es dirigido por tres de sus siete hijos y está centrado en el sector energético. Pérez Companc diversificó el holding y así nació en 1999 la alimenticia Molinos Río de la Plata.
El dueño del Grupo Perez Companc se transformó en uno de los empresarios más influyentes del país y su familia aparecen en el puesto 809 de las familias más ricas del mundo de la revista Forbes. Desde sus orígenes en el campo, pasando por la compañía naviera, el banco, y llegando hasta la actualidad, con actividades en Alimentos, Agro y Energía, fue un empresario que expandió sus negocios de forma estratégica.
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