Tras la muerte de Nora Cortiñas, anoche, como cada jueves desde 1977, las Madres de la Plaza de Mayo realizaron la ronda alrededor de la Pirámide de Mayo para reclamar por la aparición de sus hijos detenidos desaparecidos, y contaron con el acompañamiento de miles de personas que se acercaron espontáneamente para homenajear a la "Madre de todas las batallas".
Fue quizás una de las rondas más emotivas, sin la presencia de Cortiñas que falleció a los 94 años y pasó casi medio siglo buscando a su hijo Gustavo Cortiñas, secuestrado el 15 de abril de 1977 en la vía pública.
La despedida de Norita continuará hoy con un velorio en el Espacio de la Memoria y de la Vida del Predio Mansión Quinta Seré, en Castelar, desde las 9 a las 18 horas. La dirección para acceso peatonal es San María de Oro 3530 y para acceso vehicular es Blas Parera 135.
Nora Morales de Cortiñas, o Norita, nació 22 de marzo de 1930 en Buenos Aires. Fue psicóloga social y profesora en la facultad de Ciencias Económicas de la UBA. A partir de la desaparición de Gustavo, comenzó una incansable búsqueda de verdad a partir de una mirada colectiva y se transformó en cofundadora en 1977 de Madres de Plaza de Mayo, desde donde luchó por recuperar a hijos y nietos desaparecidos y por justicia por los crímenes cometidos por el terrorismo de Estado.
Por su gran ejemplo, recibió sinfines de reconocimientos, entre ellos fue distinguida como Doctora honoris causa por la Universidad Libre de Bruselas en el año 2000, por la Universidad de Salta en 2004 y por la Universidad de Buenos Aires en 2012. Días atrás, fue homenajeada en la Legislatura porteña por su "trayectoria, compromiso y defensa de la democracia y los derechos humanos" con el premio Jorge Morresi.

El último 24 de marzo, Nora Cortiñas marchó a la Plaza y hasta final participó de la ronda de los jueves en su silla de ruedas. "La madre de todas las batallas" siempre estuvo y siempre va a estar.