Durante las últimas horas del domingo se sintieron una serie de sismos en la región de Cuyo, más específicamente en las provincias de Mendoza, Catamarca y San Juan. Pese a la baja capacidad de daño de los mismos, hubo reportes de temblores y fuertes ruidos en diferentes ciudades de la región.
El Instituto Nacional de Prevención Sísmica (Inpres) informó sobre seis temblores a poca profundidad en un lapso de cuatro horas y con intensidad de entre 4.5 y 2.5 en la escala de Richter. El organismo dio aviso de la concatenación de lo eventos, ya que algunos fueron separados por tan solo un minuto de diferencia.
El primero de los sismos ocurrió a las 20.10 al sur de la ciudad de Mogna, en el centro de la provincia de San Juan. Tuvo una magnitud de 3.2 en la escala de Richter y sucedió a tan solo 10 kilómetros de la superficie. Este fue seguido por un segundo temblor a las 21.32, de una magnitud menor: 2.5 y a 12 km bajo tierra en la frontera con Mendoza, al suroeste de Barreal y al norte de Uspallata.
Apenas un minuto después, los propios vecinos de Mendoza sintieron el sismo más poderoso de la noche: un temblor de 4.5, a cinco kilómetros de la superficie. Ciudadanos de las localidades de Tunuyán, San Martín, La Consulta, Campo de los Andes y Tupungato alertaron sobre el movimiento de artefactos en los hogares, aunque no hubo destrozos considerables.
Poco más de 10 minutos después se sintió otro, de 3.0 y a ocho kilómetros de la superficie, pero se sumaron la Ciudad de Mendoza, Rivadavia y San Rafael. Para las 22 llegó un tercer temblor en la misma zona, pero cada vez de menor capacidad (2.5) y a mayor profundidad (10km).
El último de los sismos ocurridos durante la noche tuvo lugar en Catamarca. Se trató de un temblor menor en comparación a los percibidos en Mendoza, a una profundidad de 154 kilómetros de la superficie y de una magnitud de 2.9, pero que alcanzó a ser percibido, sutilmente, en Andalgalá y Belén.