En línea con lo que pasa a nivel nacional, el gigante cementero Loma Negra compartió un comunicado de prensa en el que denunció el derrumbe de las ventas al mercado interno y la reducción de las ganancias.
"Las medidas tomadas por las nuevas autoridades para sanear las cuentas públicas han generado una marcada recesión que está afectando a las industrias locales, causando en consecuencia, una fuerte retracción de la demanda de los productos de la Sociedad", advirtió la cementera.
Al respecto, indicaron que se registró una caída en las ventas de cemento y cal del 31,1 por ciento en el primer trimestre; del 45,1 por ciento en hormigón; del 28,1 por ciento en despachos ferroviarios y del 38 por ciento en otros rubros.
"Aunque la disminución en el volumen afectó a ambas modalidades de despacho de cemento, el granel fue particularmente impactado por la transición política, la paralización de obras públicas y el entorno macroeconómico", indica la cementera y agrega que "las obras del sector público se mantienen paralizadas, mientras que los proyectos privados en curso se han ralentizado, y los nuevos proyectos están a la espera de la estabilización del nuevo escenario económico".
El freno a la obra pública, uno de los eslabones principales de la política de ajuste de Javier Milei, está teniendo un enorme impacto negativo. Según los últimos números que compartió el indicador sintético de la actividad de la construcción (ISAC), en marzo se registró una caída del 42,2 por ciento interanual y del 30,3 en el primer trimestre.
Y es que por ahora no están claras cuáles podrían ser las nuevas fuentes de financiamiento que le permitan a Milei aprovechar el superávit que podría darse ante una eventual salida del cepo cambiario.