La historia de Boca contra Deportivo Trinidense había empezado atravesada. El equipo local comenzó ganando el encuentro, hasta que Figal consiguió el empate. Pero no fue hasta el minuto 91 que Edinson Cavani frotó la lámpara y sacó un golazo de tiro libre para que el conjunto Xeneixe se acomode en la tabla.

El encuentro por la cuarta fecha de la fase de grupos de la Copa Sudamericana supuso una parada más complicada de lo que esperaba Boca, ante un equipo paraguayo que, de ganar, se acomodaba en la pelea por el segundo puesto.

Antes de que terminara el primer tiempo Brian Andrada marcaría la ventaja inicial para los locales. Pero apenas comenzado el complemento, el mismo jugador recibió la segunda tarjeta amarilla y se vio expulsado. Esto representó un golpe para Trinidense que se vio en desventaja ante un equipo que salió a buscarlo.

Así fue como a los 24 minutos del segundo tiempo Figal logró el empate y, cuando todo parecía que el encuentro se iba en tablas, el uruguayo Edinson Cavani mostró una cuota de virtuosismo que no suele acostumbrar.

Ya se había jugado un minuto del tiempo adicionado cuando hubo tiro libre para Boca. Llamativamente, el uruguayo no fue a buscar el cabezazo, sino que iba a ser el ejecutante. Con un potente, pero bien ajustado remate que se metió en el ángulo superior derecho del arquero Wilson Quiñónez, Cavani marcó el segundo gol que le dio la victoria a Boca.

De esta manera, los dirigidos por Diego Martínez se ubican segundos con 7 puntos, dos menos que el líder Fortaleza que perdió 4 a 1 contra Nacional de Potosí, en la altura de Bolivia. Con estos dos resultados, Boca ahora tiene la ilusión de clasificar directo a los octavos de final, ya que recibirá al conjunto brasilero en La Bombonera y al equipo boliviano en la última fecha. Para ello, deberá ganar los dos partidos que le quedan.