En un contexto donde hay más de 180 mil casos de dengue y 129 muertes registradas, las medidas anunciadas por el Gobierno el martes no contemplan una campaña de vacunación. Lo que recomiendan desde el Ministerio de Salud es la prevención desde las casas, pero con un brote de dengue que es récord en todo el país, las preguntas sobre las opciones para combatir al mosquito se multiplican.
En primer lugar, la demanda de repelente crece ante la pervivencia de los mosquitos. El producto en los comercios está agotado y los precios son exorbitantes: uno de primera marca, en spray, de 177 ML en Mercado Libre está $18.499, cuando se trata de un artículo que normalmente ronda los $4.500.
Pero la duda sobre métodos más integrales para combatir el dengue llevan a la consulta sobre la fumigación: ¿Es necesaria? ¿Es efectiva?. De serlo, ¿Cuándo y en qué zonas debería hacerse?
En la Ciudad, el Gobierno anunció que llevó a cabo la desinsectación de parques y plazas para prepararlas para actividades programadas por el fin de semana XXL. La fumigación se llevó a cabo en el Parque de la Ciudad (Villa Soldati) y en Plaza Seeber (Palermo), pero se trata de una iniciativa que no combate directamente al Aedes aegypti, transmisor de dengue. En su lugar, las fumigaciones, a cargo del Ministerio de Espacio Público, apuntan a combatir al mosquito silvestre, la especie que llega después de la lluvia.
En el caso del Aedes aegypti, desde el Gobierno de la Ciudad informaron que no se realizarán fumigaciones porque el mosquito nace en otros ámbitos: es por esto que como política de Salud, las autoridades recomiendan las fumigaciones en domicilios.
"La fumigación del dengue debe hacerse en el domicilio, pero sobre todo en los lugares donde hay un enfermo, por eso se habla de bloqueo de casos, que es cuando alguien tiene la enfermedad en la sangre. Ese es el momento en el que el mosquito no lo tiene que picar, porque si lo pica después se lo lleva a otro", expresó Fernán Quirós, ministro de Salud porteño.