El asado es una de las comidas más populares de nuestro país con tantas maneras de prepararlo como personas que lo hacen. Si bien se dice que "sobre gustos no hay nada escrito", la leña presenta ventajas por sobre otras formas de cocción del asado en la parrilla. ¿Cuáles son?
La experiencia de hacer un asado en parrilla es una tradición que ha perdurado a lo largo de generaciones. Si bien no tiene demasiados secretos, basta con cometer un error para que el resultado sea muy distinto a lo que esperamos.
Existen diferentes formas de hacer un asado, pero una de las más tradicionales es hacerlo a la parrilla con leña. ¿Cuáles son las ventajas de hacerlo de esa manera respecto al carbón o al gas?
Ventajas de hacer un asado a la parrilla con leña
- Sabor inigualable: el aroma ahumado y el sabor distintivo que la leña (y en particular el humo) proporciona a la carne son inigualables y no se pueden obtener con otros métodos de cocción.
- Versatilidad a la hora de elegir la leña: mientras carbón o gas hay uno solo, la leña tiene distintas variantes y cada tipo de madera añade matices y sabores diferentes.
- Mayor control de la temperatura: podés ajustar la cantidad de leña y su posición para modificar el calor y poder elegir cocinar a fuego lento o alto.
- Carne más jugosa: esto se debe a que la leña proporciona un calor más suave y uniforme que el carbón, con lo cual no se seca con la misma facilidad.
- Es amigable con el ambiente: es una opción mucho más sostenible y respetuosa en comparación con el carbón o el gas. Al ser una fuente de energía renovable, la leña no emite residuos tan contaminantes para el ambiente como otros combustibles.