Desde hace unos ocho años, cada 30 de noviembre se celebra el Día Nacional del Mate, bebida que es consumida en el 90% de los hogares argentinos. Se cree que en el país se consumen, por persona, más litros de esta infusión que de agua por persona por día.
El motivo de la celebración es por la fecha de nacimiento del caudillo Andrés Guacurarí y Artigas, más conocido como Andresito. Hijo adoptivo del prócer uruguayo José Gervasio Artigas, y de origen guaraní, fue uno de los primeros gobernadores de la historia argentina, pero además es recordado por haber fomentado la producción y distribución de la yerba mate.
Según el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), Andresito, nacido el 30 de noviembre de 1778 en la localidad correntina de Santo Tomé y gobernador de la denominada Provincia Grande de las Misiones, consideraba a la yerba mate un elemento central del aparato productivo, por lo que buscó centralizar su cultivo y comercialización en mano de los guaraníes.
La festividad se conmemora desde el año 2015, luego de que el Congreso sancionara la Ley 27.117 en diciembre de 2014, que estableció al 30 de noviembre como el Día Nacional del Mate con el fin de promover el reconocimiento permanente de las costumbres argentinas.
La norma promueve que en todos los eventos y actividades oficiales de índole cultural se promocione el consumo de mate y se haga hincapié en la bebida como representativa de las tradiciones nacionales. Previamente, en 2013, el Congreso Nacional ya la había declarado como "Infusión Nacional" a través de la Ley 26.871 sancionada el 3 de julio de ese año.
"El polvo es la parte más virtuosa de la yerba. Lo que se hace cuando se agita es distribuir uniformemente las diferentes granulometrías de la yerba. Mucha gente piensa que es para sacarlo, pero es lo que más sabor aporta. Y cuando uno ceba, se tira un chorrito de agua primero para que se hinchen las partículas más pequeñas y no se tape la bombilla", explicó Martín Vijnosky, fundador de Mate&Co, sobre como preparar un buen mate.
