La televisión argentina se despidió de José Telecher, el genio detrás de personajes icónicos como Pepe Pompín, Carozo y Narizota. La noticia fue confirmada por su hermana Patricia y difundida en las redes sociales oficiales de las entrañables creaciones del artista.
Nacido en 1959, Telecher dejó una huella imborrable en la pantalla chica con sus entrañables títeres que conquistaron a varias generaciones de argentinos. Su primer personaje, Narizota, hizo su debut en el programa infantil "El verano de los chicos", conducido por las Trillizas de Oro y Pipo Pescador.
En una entrevista, Telecher reveló la génesis de Narizota, creada a partir de retazos de camperas de corderito que le proporcionaba una amiga de su hermana.
En 1978, surgió otro ícono televisivo: Carozo, inicialmente llamado Felipe. Carozo y Narizota se convirtieron en los personajes más queridos de "La Tarde los Chicos", programa conducido por el Profesor Gabinete en Canal 13.
Telecher luego tuvo su propio espacio con "El Show de Carozo y Narizota", que más tarde evolucionó a "La Granja de Carozo y Narizota". Su impacto trascendió fronteras, llegando a Estados Unidos, donde participó en programas de Telemundo y Univisión.
En los últimos años, Pepe Pompín se sumó a la lista de creaciones exitosas de Telecher. El tierno conejo hizo su debut a principios del milenio en "Desayuno", conducido por Víctor Hugo Morales en la Televisión Pública y más tarde se convirtió en parte de "Socios del Espectáculo" en El Trece.
Telecher siempre prefirió que el foco estuviera en sus "hijos" de peluche, cuidando el encanto y misterio que rodeaban a sus creaciones. Por eso existen más fotos de ellas que de él.
En una entrevista concedida el año pasado a Clarín, Telecher compartió un deseo que lamentablemente no pudo cumplir: un encuentro entre Carozo y Narizota y Topo Gigio, la marioneta italiana que le sirvió de inspiración.
Con su partida, la televisión argentina pierde a un visionario que dejó un legado de alegría y creatividad que perdurará en la memoria de todos los que crecieron junto a sus personajes.