El presidente de la Liga de España, Javier Tebas, pidió la renuncia de Rubiales, que todavía está a la cabeza de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), a pesar del repudio público y de las acciones de las jugadores de la selección española, que salieron a apoyar a Jenni Hermoso y renunciaron todas cuando ella anunció su salida después de que Rubiales la agrediera en público.

Tebas solicitó una vez más la renuncia de Rubiales al cargo y expresó, "Rubiales no renuncia porque cree que no hizo nada malo, lo cual es peor. No sabe el trato y la dignidad a la mujer, de la relación de jefe a subordinada. Eso no se puede hacer jamás, es grave e inmoral", indicó Tebas en la conferencia de prensa que brindó en la Usina del Arte en el marco del Sports Summit Leaders.

Y agregó: "Tiene que saber que no puede agarrar a una jugadora como un saco de patatas. Ni hablar de tocarse los genitales en un palco, pero realmente no me sorprendió lo de Rubiales".

Rubiales, en pleno festejo por haber ganado la Copa del Mundo, agarró por la cara a Jenni Hermoso y le dio un pico por la fuerza, que quedó grabado por las cámaras que seguían a las jugadoras en el festejo. El repudio a nivel mundial fue instantáneo. Minutos más tarde, en medio de la euforia por la copa, en un vivo de Instagram de las jugadoras en el vestuario, alguien le preguntó a Jenni qué le había parecido la situación que pasó con Rubiales y Jenni respondió, "no me ha gustado".

Días más tarde, la jugadora ratificó su posición y se pronunció en un comunicado de la Asociación de Futbolistas Profesionales (FUTPRO), donde además pedía por la implementación de protocolos justos que condenen las situaciones de acoso u agresión sexual a las jugadoras.

Jenni Hermoso el martes presentó una denuncia contra Rubiales por agresión sexual ante la Fiscalía de la Audiencia Nacional. La Fiscalía informó que presentará "a la mayor brevedad posible" una querella contra Rubiales ante los Juzgados Centrales de Instrucción de la Audiencia Nacional, teniendo en cuenta que el hecho denunciado ocurrió fuera del país, durante la consagración de las españolas en Australia.

"El tema es muy grave, más allá del acoso sexual, es bochornoso que un jefe a una empleada, le pida un pico. Ella no tiene tiempo de reacción y además Rubiales habla de consentimiento, es insólito", dijo Tebas y pidió, una vez más, su renuncia efectiva.

Hasta ahora, la FIFA suspendió a Rubiales por 60 días y la Real Federación Española de Fútbol, en consecuencia, activó los protocolos internos, a raíz de los que le sustrajeron el auto oficial, el celular y el sueldo. Desde la RFEF resolvieron pedir su dimisión pero Rubiales todavía no presentó su renuncia.