Boca y Racing empataron por 0-0, en La Bombonera, en la ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores. De esta manera, la Academia se llevó un resultado positivo, ya que, el Xeneize mereció ganar y ahora todo se definirá en el Cilindro de Avellaneda el próximo miércoles.

En el duelo de ayer, en el que el elenco de Jorge Almirón fue claro dominador, hubo dos polémicas importantes que afectaron directamente al resultado del encuentro. Primero, cuando el partido acababa de empezar, le anularon un gol al local.

Es que Boca tenía un tiro de esquina a su favor y un alcanzapelotas acomodó rápido la pelota; Valentín Barco ejecutó el corner al instante, Edinson Cavani cabeceó de forma excelente y convirtió.

Sin embargo, el árbitro Wilton Sampaio invalidó la acción por dos motivos. Primero, un alcanzapelotas no puede acomodar el balón, solo puede limitarse a tirárselo al futbolista. Y además, había dos pelotas en la cancha en el momento que el Colo lanzó el tiro de esquina.

Y la otra polémica podría haber dejado al Xeneize con uno menos. Es que, a los 20 minutos del primer tiempo, Marcos Rojo le pegó un codazo en la cara a Maxi Romero, cuando ambos fueron a disputar una pelota aérea. El juez sólo le mostró la amarilla al defensor y todo el equipo visitante reclamó que expulsen al exfutbolista del Manchester United. A pesar de eso, el VAR no llamó al árbitro para que cambie su determinación, por lo que el dos veces mundialista siguió en cancha.

Lo cierto es que Boca y Racing no se sacaron diferencias en la ida y todo se determinará en el Cilindro de Avellaneda, el próximo miércoles. En este contexto, después del partido, el propio Rojo intentó tranquilizar a los hinchas xeneizes: "Que se queden tranquilos que esto está abierto. Se define en Avellaneda y tenemos con que ganarlo", concluyó el central.

Otra jugada polémica tuvo lugar en el segundo tiempo, cuando Nicolás Valentini cabeceó la pelota tras un tiro de esquina, y esta impacta después en el brazo de un defensor. Sin embargo, la jugada no fue advertida por casi nadie, y el árbitro cobró falta en ataque contra el arquero, que había chocado solo frente a un compañero suyo.