La agencia de noticias Xinhua informó que el canciller chino, Qin Gang, "fue separado de su cargo" y reemplazado por su predecesor Wang Yi.
El informe no dio una razón para la remoción de Qin, que estaba en el cargo desde diciembre de 2022, pero dijo que el presidente Xi Jinping firmó una orden presidencial para promulgar la decisión.
China ha mantenido un hermético silencio durante semanas sobre el destino de Qin, quien no ha sido visto en público desde el 25 de junio, día en que se reunió en la capital china con funcionarios de Sri Lanka, Rusia y Vietnam.
Desde entonces, se ha ausentado de varios eventos diplomáticos: Qin tenía previsto acudir a la última cumbre de la ASEAN que se celebró en Indonesia, a la que, según Beijing, faltó “por motivos de salud”, y no estuvo en las reuniones que mantuvieron en Beijing la secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, y el enviado especial de la Casa Blanca para el Cambio Climático, John Kerry, quien fue recibido por Wang Yi.
La ausencia del canciller chino desató una tormenta de especulaciones sobre si había sido destituido o estaba siendo objeto de una investigación oficial.
Las funciones de Qin habían sido asumidas últimamente por Wang, el máximo responsable de la diplomacia china, pues dirige la política exterior del Partido Comunista en el poder.