Faltando solamente una horas para que se diera inicio al Mundial de Fútbol Femenino que se disputará en Australia y Nueva Zelanda, un hombre armado se subió a un edificio en contrucción y desató una tragedia. El hecho ocurrió en Auckland, cerca del Fan Fest del mundial y de los hoteles donde se alojan el seleccionado de Noruega y el de Estados Unidos.
El tirador mató a dos personas e hirió a otras seis desde la terraza del rascacielos en obra. De acuerdo a informes policiales, el francotirador, de 24 años de edad, también murió. El hecho causó conmosión, además, ya que en tan solo horas, a las 19 horas locales (4 de la mañana en Argentina) se juega el partido inaugural del Mundial, que enfrenta al anfitrión Nueva Zelanda y a a la selección de Noruega.
Varios trabajadores de la torre que se encontraba en construcción fueron testigos de cómo el atacante entró al edificio para dispararle a todos.
"Esta terrible situación no podría haber llegado en peor momento, cuando el mundo tiene sus ojos puestos en nosotros. Es terrible, sobre todo porque nunca antes habíamos tenido un incidente como éste", señaló el alcalde de Auckland, Wayne Brown.
Chris Hipkins, primer ministro neozelandés afirmó: "claramente, con la Copa Mundial de la FIFA que comienza esta noche, hay muchos ojos puestos en Auckland. El gobierno ha hablado con los organizadores de la FIFA y el torneo continuará según lo planeado. Quiero reiterar que no existe una amenaza más amplia para la seguridad nacional. Esto parece ser la acción de un individuo".
También se expresó el seleccionado de Nueva Zelanda. A través de sus redes sociales, comunicaron: "La gente se despertó rápidamente cuando un helicóptero comenzó a flotar fuera de la ventana del hotel. Nos sentimos seguros todo el tiempo".