A Kylian Mbappé ya no lo quieren en el París Saint-Germain (PSG), que está haciendo acelerados méritos para convertirse en el club más impopular del mundo. Luego de haber maltratado al mejor jugador del mundo, los parisinos ahora están en malos términos con el crack francés, quien ha derrochado talento y goles durante sus seis años de estadía.

Tentado por millonarias ofertas del Real Madrid y el Liverpool, en Francia aseguran que Mbappé no regresará a los entrenamientos en París luego del último intercambio de declaraciones con los jeques qataríes que manejan el club parisino.

Según el medio L'Equipe, Mbappé avisó hace casi un año que no quería renovar con el club desde donde lo acusaron de "falta de sinceridad". El exdirector deportivo, Leonardo, fue más allá y declaró que ya era hora de que se fuese.

"Por el bien del PSG, creo que ha llegado el momento de que Mbappé se vaya, pase lo que pase”, dijo el exmediocampista brasileño. "El París-Saint-Germain existía antes de Kylian Mbappé y existirá después de él. Lleva seis años en París y, en esas seis temporadas, cinco clubes diferentes han ganado la Champions League, ninguno de los cuales contaba con Mbappé en sus filas. Eso significa que es totalmente posible ganar esta competición sin él”.

Por el bien del PSG, creo que ha llegado el momento de que Mbappé se vaya, pase lo que pase

Mientras tanto, el jugador decidió visitar Camerún, de donde es su padre, y ahora irá a Argelia, la tierra de su madre. La gira no habría agradado al PSG, donde preocupan los guiños identitarios del jugador que se producen mientras Francia intenta dejar atrás la efervescencia social tras el asesinato del joven Nahel Merzouk.

Durante las protestas y la ola de violencia social, Mbappé no tardó en tomar posición y escribió un mensaje en sus redes: "Como todos los franceses, quedamos marcados y conmocionados por la brutal muerte del joven Nahel. En primer lugar, nuestro pensamiento está con él y su familia, a quienes ofrecemos nuestras más sinceras condolencias. Evidentemente, no podemos permanecer insensibles a las circunstancias en las que se produjo esta muerte inaceptable. Desde este trágico evento, hemos sido testigos de la expresión de una ira popular cuya sustancia entendemos, pero cuya forma no podemos aprobar", escribió.