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Política

Un genocida reveló qué hicieron con el cuerpo de la madre de Wado de Pedro

El exgendarme Omar Eduardo Torres declaró por el 17 de mayo en el TOF 2 por los hechos ocurridos en lo que se conoce como la "Masacre de la calle Belén", donde informó que asesinaron a Lucila Révora, madre de "Wado" de Pedro, y a su pareja Carlos Fassano y que el cuerpo de Lucila fue incinerado en el Centro Clandestino el "Olimpo".

A Lucila Révora, según las declaraciones de Torres, la introdujeron en un tanque con una cubierta y gasoil y la quemaron para desahacerse del cuerpo. Las radios comunitarias La Retaguardia y FM Radio Presente transmitieron la declaración de Torres, en la que revelaba el destino de la madre del ministro del Interior,.

El testimonio del expolicía es parte del juicio de lesa humanidad por el circuito de crímenes cometidos en los Centros Clandestinos de Detención Olimpo, Atlético y Banco. La "Masacre de la calle Belén", en la que secuestraron a Lucila, a Fassano y se apropiaron de "Wado", que al momento tenía 2 años de edad, se llevó a cabo por orden de sus superiores.

Acusaciones previas

Su jefes del Destacamento Móvil 1 de Gendarmería, entre los que mencionó a Hugo Medina, el gendarme que ya tenía una acusación por crímenes de lesa humanidad, le ordenaron a él y a otros 60 gendarmes una nueva misión en "un galón de Lacarra y Ramón Falcón, en Floresta", según sus palabras.

La Fiscalía, a cargo de Alejandro Alagia y Berenica Timpanaro, las querellas y algunas de las defensas, ordenaron su declaración. Torres, bajo la pregunta de Timpanaro, que le preguntó si podía ubicar en la escena a Miguel Lugo, otro de los miembros de la fuerza de seguridad acusados, asintió. Torres también sumó a Sergio Nazario y a Miguel Pepe, los otros dos exgendarmes acusados en el juicio.

En qué consistió la "Masacre de Belén"

El 11 de octubre de 1978, por la tarde, los policías rodearon la casa en la que Lucila Révora y Carlos Fassano vivían con "Wado", el hijo que Lucila había tenido con Enrique De Pedro, militante de la Juventud Universitaria Peronista, trabajador judicial, integrante de Montoneros y secuestrado a mediados de 1977. Al padre de "Wado", Enrique, lo ejecutaron en la vía pública el mismo año, por Parque Chacabuco, Ciudad de Buenos Aires, después de resistirse al secuestro de una patota.

Durante la Masacre, cuando Lucila, psicoanalista y militante de Montoneros, notó que la casa estaba rodeada, se metió con "Wado" a la bañera y lo cubrió con su cuerpo para protegerlo de los tiros. Un vecino declaró que la casa había quedado como si “hubiera tenido varicela” por la cantidad de marcas de bala.

Torres expresó que la patota buscaba un motín de 150 mil dólares. De la casa, los uniformados sustrajeron una valija con billetes de 100 dólares y los cuerpos sin vida de Lucila y de Carlos, que luego trasladaron al Centro de Detención "Olimpo". A "Wado" lo dejaron en la casa de un vecino, aunque por la noche lo fueron a buscar y estuvo apropiado hasta principios de 1979 por una de las familias militares, hasta que su familia materna pudo recuperarlo.

Sobre el destino de los cuerpos, Torres testimonió que el gendarme Nazario organizó que a Fassano lo desaparecerían en un "asado" en Ciudad Evita y a Lucila la incinerarían en el Olimpo. Indicó que el "comisario Rosa", haciendo referencia a Roberto Rosa, ya condenado en tramos anteriores, participó en la introducción del cuerpo de Lucila en un tanque para deshacerse de él. "A Lucila Révora la quemaron en el Olimpo, en un tacho de 200 litros. Le pusieron una cubierta, gasoil y la quemaron ahí adentro. Estaba embarazada de seis o siete meses", testimonió.

Quién es el testigo Omar Torres

Respecto de la participación de Omar Torres, cuando la fiscalía le preguntó cómo conocía esta versión de los hechos, respondió que era porque estaba de guardia. "Todos los que estuvimos de guardia esa noche lo vimos", sostuvo. El exgendarme ya había declarado en los Juicios: la primera vez fue testigo en el Juicio a las Juntas, porque se acercó a la Conadep en 1984, dos años después de pedir su retiro de la fuerza.

El expolicía, que formó parte del Destacamento Móvil 1 de Gendarmería, indicó que sus superiores lo destinaron a cumplir tareas “en la lucha contra la subversión” en Tucumán, entre 1976 y 1977.

Fuente: Página 12

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