La Cámara Federal porteña rechazó ayer la recusación planteada contra el juez Marcelo Martínez de Giorgi en la causa que investiga adulteraciones o reescritos en los cuadernos de Oscar Centeno, el exchofer del ministerio de Planificación. De esta forma, resolvió "confirmar la resolución del juez de grado en cuanto rechazó la recusación a su respecto".
Según el fallo conocido, el juez de la sala uno del tribunal de apelaciones Mariano Llorens fue el que mantuvo a Martínez de Giorgi a cargo de la causa. La recusación había sido presentada por Jorge Bacigalupo, el amigo de Centeno que tuvo bajo su custodia los cuadernos y de quien se sospecha que adulteró los textos.
Bacigalupo pidió que Martínez de Giorgi sea apartado porque mantiene una amistad con el abogado Miguel Angel Pló, que se encuentra procesado en uno de los tramos de la causa de los cuadernos. Este argumento había sido expresado por el propio magistrado para excusarse de intervenir en expedientes derivados de este caso cuando le tocó subrogar el juzgado de Bonadio, pero ya en esa oportunidad se lo mantuvo a frente de esos casos.
"El eje sobre el cual se encaminó la recusación se basó en un vínculo personal entre el juez y otras personas que no son partícipes de este proceso ni del objeto que está llamado a develar", indicó Llorens en el fallo. A su vez, señaló: "La amistad íntima invocada y, como correlato de ello, el interés directo en el proceso se desvanece desde el momento en que las personas involucradas en esa relación no tienen ningún grado de participación en la presente investigación".
Esta investigación se inició con la denuncia por del empresario Armando Loson, imputado colaborador de la causa de los cuadernos, quien halló a través de un peritaje privado que los textos de Centeno habían sido escritos por más de una mano. En marzo pasado, el juez Martínez de Giorgi allanó la casa de Bacigalupo después de recibir los resultados de una pericia ordenada para intentar determinar a quién pertenecía la letra de las reescrituras detectadas en los cuadernos de Centeno.
A partir de la confirmación por parte de la Cámara Federal, el juez Martínez de Giorgi avanzaría con las medidas tendientes a identificar quién manipuló los cuadernos de Centeno. Una de las acciones sería comparar los manuscritos secuestrados en la casa de Bacigalupo con las modificaciones detectadas en los cuadernos de Centeno y otra, podría ser la de convocar al propio Bacigalupo para tomarle un cuerpo de escritura con el objetivo de compararlo con los textos investigados.