Catriel Ciavarella, el baterista de Divididos, habló sobre el recital que realizaron el sábado en el estadio de Vélez Sarsfield. Expresó: "Yo a veces le pongo mucho raciocinio a cosas místicas. Pero, a veces, cuando hay magia es creer, porque cuando se multiplican, evidentemente, tantas energías que van para un lado, viste, es creer o reventar". En diálogo con Pasaron Cosas, relató que "cuando está pasando, te das cuenta que a todos o casi todos los que están ahí les está pasando algo, pero recién después, cuando recibís los mensajes te das cuenta que fue realmente groso".

Para Ciavarella, lo que pasó en el recital se debió, en parte, a "la emoción, que hayan estado los chicos de La Renga, no solo tocando, porque tienen una energía ellos, son tipos... vienen con toda su gente, no vienen ellos tres, sino con toda la patota". Agregó: "Son tan sencillos, son un amor. Entonces ya todo eso se va llenando de energías. Y apenas salimos nos dimos cuenta que era un momento totalmente increíble".

El baterista de la histórica banda de rock contó que, días antes del recital, estaba acordada una participación de Chizzo, el cantante de La Renga, en el recital. En cambio, "lo otro se habló una hora antes de tocar". Ciavarella dijo: "Es muy disruptivo. Yo quería mucho que pase algo así".

Además, destacó "la generosidad" de los artistas de La Renga. Relató: "Yo estaba ahí en la charla cuando Gaby, el manager, estaba hablando con Chizzo para que toquen un tema. Y Chizzo le decía, 'pero es el show de ellos', y yo le saqué el teléfono a Gaby y le digo, 'Chizzo, por favor, estás loco. Vení, que es una felicidad para nosotros, vengan a hacer esto', porque él estaba como tan respetuoso, le parecía como irrumpir en nuestro escenario, pero no, fue un momento único".