La Policía Federal desbarató este martes una organización narco del clan Funes que funcionaba en el barrio Tablada y cuyo líder operaba desde una cárcel de Neuquén. Los integrantes de esta banda criminal mantenían un sangriento enfrentamiento por el territorio con los Camino, otro grupo de narcotraficantes.
El descubrimiento de la manera en que funcionaba esta banda narco culminó este martes, cuando la policía ejecutó la orden del fiscal federal Javier Arzubi Calvo de allanar 15 lugares distintos en el barrio Tablada. Además, se allanó el Complejo Penitenciario V de Neuquén, donde permanece preso Lautaro “Lamparita” Funes, el encargado de comandar las acciones del clan.
En el marco de esta serie de allanamientos, la policía dio con el domicilio que funcionaba como centro de acopio de drogas y secuestró cocaína y marihuana, además de varios otros objetos: balanzas, armas, municiones, dinero, vehículos, 23 celulares, dos tablets, una Notebook y un DVR. La suma de dinero secuestrada consiste en más de medio millón de pesos en efectivo y 4.900 dólares, según reportó La Capital.
El clan narco operaba bajo el mando de Lamparita Funes desde el penal de Neuquén, mientras que su madre y su hermana se encargaban de abastecer a los diferentes puntos de venta de drogas al menudeo. A raíz de los allanamientos, las dos mujeres fueron detenidas, al igual que el tío del líder. Lo más probable es que este nuevo hallazgo le valga nuevos cargos a Lautaro Funes, con lo cual podría alargarse su condena.
Lamparita Funes es uno de los cuatro hijos de Jorge “El Gordo” Funes, un narcotraficante que tiene varios antecedentes penales. Fue detenido en 2017 y trasladado al penal federal de Neuquén para cumplir una pena de siete años de cárcel por atentar contra la integridad de personas, viviendas y negocios, además de enfrentar una causa por narcotráfico. Su clan es conocido por haber protagonizado una guerra por el territorio contra los Camino en los barrios de Tablada, Parque Mercado y Municipal.
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