Santiago Korovsky escribió, dirigió y protagonizó la sitcom argentina que llegó para demostrar que sí se puede hacer humor negro. El problema nunca fue la "corrección política" de la época sino la calidad del humorista. En este caso, hace dos días que en Netflix no quedó minoría sin ligar algún palito en División Palermo.
La serie sigue durante ocho capítulos de 25 minutos cada uno a Felipe, quien recién separado decide dejar el trabajo en la empresa de su padre y se anota para formar parte de la guardia urbana de la Ciudad de Buenos Aires.
Hasta ahí, normal. Sin embargo, las fuerzas de seguridad de la Ciudad deciden crear la División Palermo para mejorar la imagen de la policía. ¿Mejorar cómo? Se trata de un grupo de gente que construirá la idea de una institución más "inclusiva".
Una mujer con discapacidad motriz (Pilar Gamboa), el psicólogo de la comisaría (Daniel Hendler) como líder, un joven de talla baja, un inmigrante, un adulto mayor que no acepta su disminución auditiva, una persona ciega y una chica trans, que es la hija del comisario, son los elegidos para demostrar la "inclusividad" de la policía de la Ciudad.
A este grupo lo acompañan dos policías metropolitanos: Esteban (Martín Garabal) y Paloma (Charo López). Ambos aprovechan cada oportunidad que tienen para recordarle a la guardia su inutilidad ya que la comisaría sufrió un recorte de recursos y aún así la financian.
El objetivo del grupo es intervenir en situaciones mediáticas para obtener visibilidad y dejar mejor parada a la ministra de Seguridad. Pero en el medio se cruzan con un caso realmente serio que empiezan a investigar. A partir de allí, la serie mezcla la comedia con una trama policial más clásica.
El elenco también está compuesto por Marcelo Subiotto, Sergio Prina, Agustín Rittano, Nilda Sindaco, Carlos Belloso, Iair Said, Alan Sabbagh, Camila Peralta, Gabriela Izcovich, Daniela Korovsky, Alicia Labraga, Fabián Arenillas y Valeria Lois.