Anoche, durante el Festival de la Canción de Sanremo, en Italia, el cantante Blanco destruyó el escenario durante su presentación, pisoteando y revoleando piezas de la decoración. El artista se había mostrado fastidiado porque no le funcionaba el auricular.
El festival de Sanremo es un certamen musical que se organiza en Italia desde 1951. El martes pasado, mientras duraba la edición de este año, un joven conocido como Blanco protagonizó un espectáculo particular: empezó a interpretar su canción junto con sus tres músicos y terminó destrozando la decoración del escenario, visiblemente enfurecido.
Apenas empezó a cantar, el músico demostró tener problemas con el audífono llevándose la mano a la oreja y haciendo gestos de desaprobación. En medio de la canción, avisó que el aparato no estaba funcionando e intentó seguir, hasta que perdió la paciencia y empezó a pisotear las flores que decoraban el lugar y a revolear piezas del escenario.
Según trascendió más tarde, el pisoteo de las flores estaba previsto en el guión, pero no así el nivel de violencia que alcanzó el cantante, quien incluso tomó a sus compañeros de banda por los hombros y los sacudió. Su comportamiento le valió el abucheo del público y duras críticas en redes sociales.
Horas más tarde, el joven pidió disculpas con un poema en su cuenta de Instagram, aseguró que no es "perfecto" y expresó su cariño al teatro donde se celebró el certamen. El director artístico del Festival de Sanremo, Amadeus, aceptó las disculpas.
"Blanco es consciente de que ha hecho algo que no debía. No ha pedido que se le comprenda, sino que se le perdone", dijo Amadeus en una entrevista televisiva. "Cuando tienes 19 o 20 años ocurre que haces algo que no quieres hacer. Aceptamos sus disculpas con serenidad", concluyó.