A horas de que se conozca el veredicto del juicio por el asesinato de Lucio Dupuy, una ONG defensora de los derechos de los niños denunció a la juega Ana Clara Pérez Ballester por “incumplimiento de los deberes de funcionario público”. En 2020, la titular del Juzgado de Familia y del Menor N°1 de La Pampa entregó la tenencia del nene de 5 años a su madre, Magdalena Espósito Valenti, y a su pareja Abigaíl Páez, quienes están acusadas de torturarlo y abusarlo hasta matarlo en noviembre de 2021.
La Fundación Más Vida hizo esta denuncia ante la Unidad de Atención Primaria, del Ministerio Público Fiscal (MPF) de La Pampa. A través de un comunicado, señalaron: “Una vez que se inicie la investigación formal podrá determinarse la culpabilidad de la magistrada denunciada, junto al resto de los funcionarios intervinientes que, sin tomar los recaudos socioambientales del caso, entregaron a Lucio al hogar donde finalmente encontraría la muerte”.
“Estamos ante un evidente caso de mal desempeño”, aseguró Raúl Magnasco, presidente de la ONG, sobre la magistrada. El titular de Más Vida sostuvo que “cuando la custodia de Lucio fue entregada a sus tíos, los sometieron a todos los estudios ambientales posibles”. “Sin embargo, cuando se trató de entregarlo a la pareja responsable de su tortura y muerte, la jueza incumplió los controles, lo que derivó en la muerte evitable de Lucio”, explicó.
“Confiamos en que la fiscalía asuma su rol y que la jueza Ballester, como mínimo, de un paso al costado”, agregó Magnasco. Por último, expresó su malestar: “Lucio perdió la vida de la peor manera, pero quién sabe cuántos niños más se encuentran en peligro en este mismo instante por el accionar de esta jueza”.
Mañana a las 12 del mediodía, los jueces Alejandra Ongaro, Andrés Olié y Daniel Sáez Zamora resolverán si Espósito Valenti y Páez son “culpables” o “no culpables” del delito de “homicidio calificado y abuso sexual ultrajante”. Mientras se espera el veredicto, el abuelo de Lucio Dupuy exigió ayer que la madre de su nieto y la pareja reciban “una condena ejemplar, a prisión perpetua y sin beneficios” para que “esto no vuelva a suceder”.
