El serbio Novak Djokovic ganó ayer el Abierto de Australia, con lo que escaló nuevamente a lo más alto de la historia del tenis mundial y alcanzó ayer récord de Rafael Nadal con 22 títulos de Grand Slam.
Tras ganarle en tres sets a 6-3, 7-6 (4) y 7-6 (5) a Stéfanos Tsitsipas, el serbio se proclamó campeón por décima vez en Melbourne y se tomó una particular revancha frente a la deportación que sufrió el año pasado, cuando se negó a vacunarse contra el Covid para participar en el torneo.
Y durante el festejo, el serbio demostró que no sólo está en la cima de la historia del tenis, sino que también va arriba de la Scaloneta. En un despacho de Alejandro Klappenbach, periodista de ESPN, Djokovic se animó a cantar Muchachos, el himno de la selección campeona del mundo.
Entre risas y un poco avergonzado, el serbio siguió renglón a renglón la letra de la canción que reivindica al Diego, Las Malvinas Argentinas y a la Selección, e incluso demostró en el coro que se la sabía, aún con su precario español.
En la entrevista, Djokovic confesó nuevamente su fanatismo por Lionel Messi y por eso siguió bien de cerca los movimientos del equipo argentino, e incluso estuvo presente el 18 de diciembre en Lusail para la final ante Francia. Allí fue que escuchó la canción argenta y quedó mimetizado con la hinchada.