La Aduana incautó ayer una colección de billetes utilizados en los campos de concentración nazi. Un ciudadano, que era buscado por Interpol, intentaba ingresar desde Uruguay estas monedas, entre otras, que estaban valuadas en más de 120 mil dólares.
A través de un comunicado, el organismo informó que agentes especializados de la Dirección General de Aduanas-AFIP con apoyo de un can aduanero "desarticularon el contrabando de una colección de monedas y billetes con piezas de destacado valor histórico en el control de un buque proveniente de Colonia, Uruguay".
Según la Aduana, el operativo comenzó por un alerta que recibieron de la Interpol y realizaron un control durante el desembarque del Superferry Express sobre un vehículo manejado por un ciudadano que tenía en curso tres causas penales. Se trata de un reconocido coleccionista que había negado tener bienes para declarar al embarcar.
Sin embargo, durante este procedimiento se encontró una colección de billetes y monedas de diferentes países del mundo. Estos fueron secuestrados por la Aduana porque excedía la franquicia de equipaje para ingresos por vía fluvial (300 dólares por persona) y el límite de ingreso de esta moneda (10.000 dólares por persona).
Cabe destacar que entre lo incautado hay billetes alemanes nazi y ucranianos utilizados en los campos de prisioneros de la Segunda Guerra Mundial, precisaron desde la Aduana. Además, secuestraron varios billetes de colección como 1 franco de la isla de Martinica de 1947, 1 peso chileno de 1879 y dos billetes estadounidenses de 1862, con valores que rondan los mil dólares.
La Justicia Penal Económica ordenó el secuestro de la mercadería, tomar muestras fotográficas, huellas dactilares e informar antecedentes de los involucrados. Finalmente, dispuso la prohibición de su salida del país y la verificación del domicilio de los contrabandistas.