Fueron más de cien los testigos que declararon en el juicio por el crimen de Lucio Dupuy y fueron ayudando a reconstruir los hechos. Entre otras cosas, se dijo que el nene pasaba hambre, que era torturado y que, la música en esa casa estaba siempre a un volumen elevado. Esto último resulta clave en la declaración de dos vecinas de las acusadas.
Ambas coincidieron en que era una constante la música a todo volumen, y tanto la fiscalía como el abogado de la familia Dupuy creen lo hacían para que no se escucharan los golpes y para tapar las quejas y súplicas de Lucio. Pero una de ellas aportó un dato particular, que, además, fue acompañado por capturas de chat.
Se trata de un episodio del 25 de agosto del 2021, cuando faltaban dos meses exactos para el asesinato. La mujer contó que desde su habitación escuchaba los golpes que en la tarde de ese día estaba recibiendo el nene, por lo que le escribió a su hermano para que llame a la policía.
Una vecina de las acusadas declaró que escuchaba como lo golpeaban a Lucio y que llamaron a la policía, pero esta nunca llegó.
“¿Me llamás a la policía? Que yo tengo el parlante roto. Porque le están pegando al nene de al lado”, escribió la vecina. Del otro lado, le responden que la policía ya estaba en camino. La mujer sigue la charla y agrega: “Todos los días llega del jardín y la novia de la mamá lo caga a palos. Les golpee la pared porque se escucha todo desde mi pieza y en la calle también”.
Mientras la policía estaba en camino -teóricamente, porque jamás llegó-, la testigo dijo que escuchó a una de las acusadas decirle a la otra: "Sacale la ropa y cagalo a palos, dejalo marcado porque lo mato yo". El jefe de policía de La Pampa, Daniel Guinchinau, dijo algunos días después del asesinato de Lucio que los efectivos no acudieron al lugar porque tenían mal la dirección. Dos meses después lo mataron.