El expresidente Mauricio Macri festejó anoche la decisión del mandatario de Venezuela, Nicolás Maduro, de no venir a la Argentina para participar de la cumbre de la CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños). "Maduro tuvo miedo. Se dio cuenta de que algo está cambiando en la Argentina", aseguró a través de una filosa publicación en Twitter.
La llegada de Maduro al país había sido repudiada por la oposición, principalmente por Juntos por el Cambio. Es más, el propio Mauricio Macri había publicado una carta "Vergüenza y Esperanza", en la que rechazó el arribo del mandatario venezolano y de su par cubano, Miguel Díaz-Canel.
"En estos días la Argentina recibirá a los dictadores Nicolás Maduro, de Venezuela, y Miguel Díaz-Canel, de Cuba. La inmensa mayoría de los argentinos sentimos vergüenza de que nuestro país se asocie con otros donde hay persecución, tortura, narcoterrorismo, presos políticos y elecciones fraudulentas que se burlan de la democracia", sostuvo el líder del PRO. Además, recordó que Venezuela sufrió "el éxodo más grande de la historia de América Latina".
A través de este comunicado que compartió en las redes sociales, Mauricio Macri expresó que "la bienvenida a estos dictadores no la organizamos nosotros los argentinos, sino un gobierno que languidece en su mediocridad, uno que pronto se llevará el desgraciado honor de haber sido el peor gobierno de la historia de la democracia de nuestro país". Para el expresidente, el gobierno de Alberto Fernández no será reelecto y las urnas decidirán tener un nuevo gobierno que respetará la ley y las instituciones de la democracia: "Nunca más le daremos la bienvenida a los dictadores".
Otros dirigentes de Juntos por el Cambio se sumaron a las críticas de Mauricio Macri. Mientras varios particulares y organizaciones civiles denunciaban al presidente de Venezuela ante la justicia argentina, Patricia Bullrich hizo una presentación en la DEA con el objetivo de detener a Nicolás Maduro en Ezeiza.
En este contexto, la cancillería de Venezuela anunció la cancelación del viaje del presidente de su país porque se preparaba un ataque en contra de su delegación. "En las últimas horas hemos sido informados de manera irrebatible de un plan elaborado en el seno de la derecha neofascista, cuyo objetivo es llevar a cabo una serie de agresiones en contra de nuestra delegación encabezada por el presidente", afirmaron en un comunicado.
