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Policiales

"Te voy a matar, hijo de puta, te voy a robar la moto", uno de los testigos denunció que Lucas Pertossi andaba con ganas de sangre

En la décima audiencia que se desarrolló esta mañana declaró como testigo Pablo Gastón Zapata, un joven de Zárate que unas semanas antes del crimen de Fernando Báez Sosa había denunciados que dos de los imputados lo golpearon y le robaron la moto.

Zapata declaró que Lucas Pertossi lo golpeó y amenazó de muerte pocos días antes del crimen de Fernando. “Hijo de puta, te voy a matar, te voy a robar la moto”, le dijo el rugbier en un bar, según declaró el testigo durante la audiencia.

Según relató Pablo Gastón Zapata sufrió dos ataques de parte de Lucas Pertossi. El primero fue el 10 de diciembre y el otro apenas cinco días después. “Estábamos tomando algo en un bar y uno de mis amigos se cruzó con Fabricio Pérez, que viajaba a Gesell el 17 a la noche y llega a la mañana y los rugbiers le avisan que se vuelva porque ´había problemas´”, relató.

Zapata contó que esa noche los corrieron y patearon entre seis y entre ellos estaban Blas Cinalli, uno de los acusados, y Juan Pedro Guarino, que formaba parte del grupo en Villa Gesell pero que fue absuelto por el crimen de Fernando.

En el segundo ataque Lucas Pertossi concretó las amenazas que le había hecho a Pablo Zapata: lo golpeó, lo corrió y mientras Pablo escapaba se cayó de una escalera y le robaron la moto.

"La primera vez nos atacaron a piedrazos entre doce. Hicieron ese cercado que te hacen ellos para que nadie se escape. Pensé que me mataban. Hasta el día de hoy siento puntadas en la cabeza", explicó el joven en un medio de comunicación.

Pablo Gastón Zapata hizo la denuncia en la comisaría de Zárate pero la causa quedó en curso. Ante su testimonio, Hugo Tomei intentó invalidarlo acusando que nada tenía que ver con el asesinato de Fernando, pero el Tribunal no dio a lugar.

El hecho descripto por Zapata muestra la violencia habitual con la que se manejaban los agresores y cómo se movían en grupo y proporcionando cercos para evitar posibles defensas. Lo lamentable es que si en Zárate hubieran actuado ante la denuncia, por ahí el crimen de Fernando no ocurría.

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