Ocasionado por las altas temperaturas, el granizo y las sequías, el Comité de Organizaciones Profesionales Agrícolas (COPA) y la Confederación General de Cooperativas Agrícolas (Cogeca) alertó que Europa disminuyó su producción de lúpulo en un 28% en 2022.
Según un informe de estas organizaciones y reproducido por el sitio especializado en cervezas A la fresca!, Alemania, principal país productor de lúpulo en Europa, tuvo una caída del 28,6% el año pasado (unas 34.200 toneladas frente a las 47.862 del 2021) y del 40,3% en ácido alfa, aquellos utilizados para el amargor.
República Checa, segundo país productor, informó una reducción de su rendimiento este último año en un 48,3% y de 57,5% en los ácido alfa. De hecho, la variedad de lúpulo más perjudicada fue la Saaz, que representa el 83% del total de la superficie destinada al cultivo del lúpulo en el país y que, este 2022 tuvo su menor rendimiento desde 1960.
En el texto se destaca que por el aumento “exponencial” de los costos de producción y la falta de productos fitosanitarios, “los resultados de la cosecha suponen un difícil reto para la industria del lúpulo en su conjunto”.
“El mercado dispondrá de un suministro limitado de lúpulo a partir de 2022. Es probable que el suministro de variedades individuales no alcance para cumplir con los contratos vigentes firmados con los productores cerveceros”, alertó Zdenek Rosa, presidente del Grupo de Trabajo “Lúpulo” del Copa y de la Cogeca.
Finalmente, el informe del Copa y la Cogeca cuestiona la iniciativa para la reglamentación sobre el uso sostenible de los productos fitosanitarios que podría ocasionar que “muchos agricultores decidan dejar de cultivar”. “Si se imponen prohibiciones sin ofrecer alternativas viables, los productores de la UE se verán forzados a cerrar el negocio y habrá que sustituir la producción comunitaria por las importaciones”, indicó Rosa.
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