El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, habló ante el Congreso de Estados Unidos para agradecer por el apoyo prestado a su país en la guerra y solicitar más armamento, con el objetivo de lograr un “punto de inflexión” contra los rusos en el campo de batalla.

“Ucrania se mantiene en sus líneas y nunca se rendirá. Nuestras dos naciones están aliadas en esta batalla”, afirmó Zelensky en una sesión conjunta del Senado de Estados Unidos y de la Cámara de Representantes, en la que fue recibido con ovaciones y aplausos y donde recalcó que “la tiranía rusa ha perdido el poder” sobre su país.

“Es una batalla no solo para la vida, la libertad y la seguridad de Ucrania y de cualquier otra nación que Rusia intente conquistar. Esto definirá el mundo en que vamos a vivir”, dijo confiado en que Ucrania ya se ganó el apoyo de la población norteamericana. A su juicio, “los norteamericanos no deben ver el apoyo a su país como caridad, sino como un inversión en democracia".

Es una batalla no solo para la vida, la libertad y la seguridad de Ucrania y de cualquier otra nación que Rusia intente conquistar. Esto definirá el mundo en que vamos a vivir

“Ucrania nunca ha pedido que soldados estadounidenses combatan por nosotros en nuestro territorio. Les garantizo que nuestros militares pueden operar perfectamente tanques y aviones estadounidenses”, añadió.

El discurso de Volodimir Zelensky ante las dos cámaras parlamentarias se produce durante la negociación de los presupuestos estadounidenses para el año fiscal 2023, que incluyen unos 45.000 millones de dólares en asistencia a Ucrania, una cifra similar a la que tomó Mauricio Macri como deuda en 2017 para Argentina.

Este miércoles, el gobierno de Joe Biden anunció un paquete de ayuda militar de 1.850 millones de dólares que por primera vez incluye el sistema de defensa antiaérea Patriot de largo alcance, que Zelensky había pedido insistentemente para interceptar los misiles rusos que han destruido infraestructuras clave en Ucrania.

El debate en el Congreso norteamericano se produce a poco más de una semana de que el Partido Republicano, asuma el control de la Cámara Baja, con lo que la perspectiva sobre este conflicto podría cambiar ya que varios de sus miembros han cuestionado que Estados Unidos deba continuar dando ayuda militar a Ucrania, ante el alto costo que tiene para las arcas federales.