La provincia de Tierra del Fuego atraviesa una situación trágica. Más de 9.000 hectáreas de bosque de la reserva natural Corazón de la Isla están bajo fuego, desde hace siete días, por las malas condiciones meteorológicas y por el difícil acceso a la zona.

Los primeros focos fueron detectados el miércoles pasado desde el destacamento Lago Escondido de la Secretaría de Protección Civil. Los brigadistas confirmaron que habían empezado en inmediaciones del Río Claro y del llamado Refugio Fueguino.

“La mejor forma de colaborar es no acercándose a la zona del fuego, y seguir las normas vigentes para la prevención de incendios”, expresó el gobernador Gustavo Melella, quién prohibió hacer fuego en lugares agrestes en todo Tierra del Fuego, incluso en sitios habilitados. Además, informó que se encuentran afectados al operativo aproximadamente 70 combatientes y 2 aeronaves: 1 helicóptero y un avión hidrante.

A su vez, hay más de 200 personas que se encuentran afectadas de manera permanente a la cuestión logística y apoyo al operativo, a través del trabajo articulado entre diversas instituciones como los Municipios de Tolhuin, Río Grande y Ushuaia; Guardaparques Provinciales, Bomberos Voluntarios de las tres localidades, Defensa Civil, Protección Civil, Parques Nacionales, entre otros. Además, peligran 286 mil cabezas de ovinos y casi 60 mil vacunos.

“Las características que presenta el incendio son de una inseguridad constante para el personal, queremos cuidar en primera instancia a nuestra gente, y a medida que las condiciones den una tregua, ahí vamos accionando y asegurando todas las partes del incendio que se puede”, explicó ayer Pablo Paredes, director provincial de Manejo del Fuego. Para el funcionario, realmente el incendio avanza muy rápido.

Así se incendia Tierra del Fuego: