Eduardo Costantini, el dueño del Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (MALBA), pagó 34,9 millones de dólares por el cuadro “Diego y Yo”, un autorretrato de Frida Kahlo que estará expuesto desde el jueves, por un año, en el museo de la calle Figueroa Alcorta.
El empresario- uno de los cinco argentinos que apareció en el ranking Forbes- relató la subasta, en la que participó telefónicamente y a la que entró sobre el final porque buscaba quedarse con esta obra en específico. “Esto muchas veces tienen un componente emocional importante. Yo busco crear un acervo social y cultural latinoamericano”.
En conversación con Ernesto Tenembaum, Costantini se refirió también a la actualidad de Argentina y sus problemas sociales. “Es utópico pedir que las personas adineradas redistribuyan voluntariamente el dinero que tienen. Me parece que la psicología humana no funciona de esa manera. La redistribución tiene que venir desde los impuestos”, dijo.
La psicología humana no funciona de esa manera. La redistribución tiene que venir desde los impuestos.
Y explicó que, en su visión, el impuesto al patrimonio “está bien” y que el principal desafío de la política económica es encontrar un equilibrio entre los impuestos, lo más progresivos posibles, y las condiciones de “seducción” del país. Porque si se suben demasiado los impuestos, “es normal que las personas se pregunten ‘¿me conviene vivir acá?’”.
Costantini aseguró que, a diferencia de buena parte de los capitalistas del país, tiene toda su economía en blanco y es a eso a lo que debe propender el sistema económico argentino.
La economía en negro “es un delito social en el exterior y no se ve”, dijo, “acá es normal. Es totalmente anormal que los argentinos ahorremos en el exterior. Eso es una locura y es inconcebible haber llegado a este punto”.