La ola de calor en Europa es cada día más grave y, por ese motivo, las autoridades están tomando medidas extremas para combatirla. Hoy el Reino Unido alcanzó la temperatura más alta de su historia y llegó a tocar un pico de 40,2° grados.
En este sentido, el secretario de Transporte, Gran Shapps, dijo que la infraestructura británica “simplemente no se construyó para soportar esta clase de temperatura, y pasarán muchos años antes de que podamos reemplazarla”.
Y agregó que reemplazarla y actualizarla, para que resista temperaturas muy por encima o, a veces, muy por debajo de lo que están acostumbrados es un proceso largo y que "son los efectos del calentamiento global".
Mientras tanto, en Inglaterra tomaron medidas drásticas para combatir esta inesperada ola de calor que está azotando al viejo continente. Una de ellas fue cubrir con papel de aluminio el Hammersmith Bridge, el puente más famoso de ese país. Lo construyeron hace 123 años y, desde el Gobierno británico, aseguraron que se mantendrá tapado durante los próximos días, para evitar que se sobrecaliente y se agriete.
Según informan medios locales, las autoridades pusieron láminas de aislamiento de plata en las cadenas del puente para reflejar el sol. Y, además, instalaron un sistema de refrigeración que funciona durante la noche para evitar cualquier posible desperfecto en la construcción.
“A medida que lidiamos con el calor extremo actual, también estamos ideando soluciones innovadoras para mantener la temperatura dentro del umbral", afirmó Sebastian Springer, el ingeniero que está al frente del proyecto de preservación del puente.